Día Mundial De La Concientización Sobre el Autismo

Publicado: 02 abr 2022
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En el año 2007 la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), muy preocupada por la prevalencia del autismo en todas las regiones del mundo, declaró por unanimidad el 2 de abril como Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo.

Por resolución 62/139 del 18 de diciembre de 2007 (A/RES/62/139), la Asamblea instó a los Estados Miembros, las organizaciones competentes del sistema de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, así como a la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales y el sector privado, a que observen debidamente este día y tomen las medidas para la toma de conciencia a través de la sociedad sobre los niños con autismo.

El autismo, denominado también como Trastorno Generalizado del desarrollo (TGD) o TEA (Trastorno del espectro autista), es un trastorno que impacta en la comunicación, la socialización y la conducta.

Entre los síntomas y signos de alarma frecuentes, detectables a partir de los 18 meses, se destaca la ausencia de contacto visual, el rechazo al contacto corporal, la ausencia de señalamiento de objetos, la falta de reacción al ser llamado por su nombre, la ausencia de juego imaginativo o simbólico, entre otras.

Es importante tener en cuenta que entre los 2 y los 4 años los trastornos severos del lenguaje pueden confundirse con un diagnóstico de TGD ya que este último se caracteriza entre otras cosas por una dificultad importante de las habilidades lingüísticas.

No todos los chicos con trastornos del lenguaje están dentro del espectro de los trastornos generalizados del desarrollo y es fundamental un buen diagnóstico temprano para que el camino terapéutico sea exactamente el que necesita el niño.

En la actualidad, si bien aún no se conoce el mecanismo que explica la manifestación del trastorno autista; existen numerosas investigaciones que evidencian diferencias en cuanto al volumen, estructura y funcionamiento del cerebro de un niño sin TEA de aquel que sí es clasificado bajo este trastorno.

En la medida en que el niño reciba una evaluación completa, se arribará a la estimulación más adecuada y, por tanto, las mejorías alcanzadas se evidenciarán en un plazo de tiempo menor.

 

Los niños o adultos con TEA podrían presentar las siguientes características:

  • No señalar los objetos para demostrar su interés (por ejemplo, no señalar un avión que pasa volando).
  • No mirar los objetos cuando otra persona los señala.
  • Tener dificultad para relacionarse con los demás o no manifestar ningún interés por otras personas.
  • Evitar el contacto visual y querer estar solos.
  • Tener dificultades para comprender los sentimientos de otras personas y para hablar de sus propios sentimientos.
  • Preferir que no se los abrace, o abrazar a otras personas solo cuando ellos quieren.
  • Parecer no estar conscientes cuando otras personas les hablan pero responder a otros sonidos.
  • Estar muy interesados en las personas pero no saber cómo hablar, jugar ni relacionarse con ellas.
  • Repetir o imitar palabras o frases que se les dicen, o bien, repetir palabras o frases en lugar del lenguaje normal.
  • Tener dificultades para expresar sus necesidades con palabras o movimientos habituales.
  • No jugar juegos de simulación (por ejemplo, no jugar a “darle de comer” a un muñeco).
  • Repetir acciones una y otra vez.
  • Tener dificultades para adaptarse cuando hay un cambio en la rutina.
  • Tener reacciones poco habituales al olor, el gusto, el aspecto, el tacto o el sonido de las cosas.
  • Perder las destrezas que antes tenían (por ejemplo, dejar de decir palabras que antes usaban).

 

No se conocen todas las causas de los TEA. Sin embargo, hemos aprendido que, probablemente, existan muchas causas para múltiples tipos de TEA.

Puede haber muchos factores distintos que hagan que un niño tenga más probabilidades de tener un TEA, incluidos factores ambientales, biológicos y genéticos.

Los TEA ocurren en todos los grupos raciales, étnicos y socioeconómicos, pero es 4.5 veces más frecuente en los niños que en las niñas.