Diputados: la Oposición Aprobó la Ley que Limita los DNU.
La Cámara de Diputados aprobó este miércoles la reforma de la Ley 26.122 de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), con 140 votos afirmativos, 80 negativos y 17 abstenciones.
La iniciativa, que ya contaba con media sanción del Senado, limita la capacidad del presidente Javier Milei para gobernar por decreto y habilita a que estos puedan ser rechazados por una sola de las cámaras.
La aprobación se alcanzó pese a las presiones del Poder Ejecutivo, que ya anticipó que vetará la ley.
En la Casa Rosada señalan que corren con ventaja: la oposición no alcanzó los dos tercios necesarios para revertir un eventual veto, aunque el oficialismo tampoco logró el tercio que necesitaría para blindarlo.
Algunos bloques opositores ya anticiparon que, si Milei veta la norma, podría desatarse un conflicto institucional que termine en la Corte Suprema.
La ley vigente, impulsada en 2006 por la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner, establece que un DNU entra en vigor de inmediato y solo puede ser anulado si es rechazado por ambas cámaras.
La nueva norma da un giro:
- Para que un DNU siga vigente deberá contar con el aval explícito de ambas cámaras, por mayoría absoluta.
- Se fija un plazo máximo de 90 días para ese tratamiento; si no se aprueba en ese tiempo, el decreto cae automáticamente.
- Además, basta el rechazo de una sola cámara para invalidarlo, como ocurre con cualquier ley.
La votación requirió mayoría absoluta (129 votos afirmativos) y superó con margen ese umbral: 140 a favor, 80 en contra y 17 abstenciones.
El artículo 3 de la reforma a la ley 26.122, que establecía un plazo de vigencia de 90 días a los decretos, dándole ese período tiempo al Gobierno para lograr la convalidación en las dos cámaras, salió rechazado porque no superó el umbral de los 129 votos positivos (mayoría absoluta).
Quedaron a apenas dos votos, con 127 positivos, 90 negativos y 17 abstenciones.
Para convertirse en ley en el día de la fecha, era necesario que la totalidad de los artículos quedaran ratificados tal como vinieron del Senado.
Si bien el temario es amplio e incluye interpelaciones y pedidos de informes verbales a altos funcionarios del Poder Ejecutivo, el asunto que más desvelaba a la Casa Rosada es la reforma de la ley 26.122 que regula los DNU, y que de promulgarse le permitirá a la oposición voltear los decretos con el rechazo de una sola cámara.
Con la modificación propuesta, según lo que se votó en el Senado, los DNU tendrían una vigencia de tres meses desde su publicación en el Boletín Oficial, y el oficialismo tendíaá ese plazo para conseguir su convalidación en los plenos de ambas cámaras de modo tal que los efectos jurídicos de esos decretos queden en pie una vez transcurrido ese período.
A la inversa, la oposición ya no necesitaría mayorías en ambas cámaras para derribar los decretos y le bastaría con rechazarla en una sola para derogarlos.
En caso de que los decretos sean derogados, el Poder Ejecutivo no podría disponer un decreto que trate sobre la misma materia hasta el siguiente año parlamentario.
Además, con la reforma planteada -que viene con media sanción del Senado- quedaría prohibido que un mismo decreto verse sobre más de una materia, algo que sucedió, por ejemplo, con el polémico y resistido mega DNU 70/2023.
La oposición no pudo convertir en ley el nuevo régimen de decretos de necesidad y urgencia, lo cual le da esperanzas al Gobierno, aunque el Senado podría insistir con la media sanción en una próxima sesión.
De esta manera, el oficialismo gana tiempo hasta que el Senado vuelva a tratar -posiblemente después de las elecciones- esta iniciativa que apunta a poner en jaque la capacidad del presidente de gobernar a través de un instrumento discrecional como los DNU.
El quórum se consiguió con 132 diputados:
- 96 de los 98 miembros de Unión por la Patria,
- la mayoría de Encuentro Federal,
- el bloque Democracia para Siempre,
- la Coalición Cívica,
- el Frente de Izquierda,
- tres legisladores radicales (Julio Cobos, Fabio Quetglas y Roberto Sánchez),
- y dos ex libertarias del bloque Coherencia, Lourdes Arrieta y Marcela Pagano.





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