Día Nacional del Químico.
El 26 de noviembre es el Día del Químico, en homenaje a Enrique Herrero Ducloux.
El 26 de noviembre del año 1901 egresó Enrique Herrero Ducloux, primer Doctor en Química del país. Fue el primer egresado del doctorado en Química de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires.
También fue un profesor universitario de vastísima trayectoria, decano de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de la Plata y un químico de primer nivel en el país.
Nació en Navarra, España, el 6 de enero de 1877, pero viajó siendo niño a la Argentina con su familia, donde desarrollaría su educación, su carrera profesional y su vida.
Cursó los estudios primarios y secundarios en Santa Fe y se diplomó como maestro normal. Más tarde, fue secretario de la Dirección Provincial de Escuelas, a la vez que era docente en varias escuelas normales de la ciudad de Rosario.
En 1896, pasó a residir en Buenos Aires, y cursó estudios superiores en la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UBA. En 1901, fue el primer doctor en química (curso inaugurado en 1896) de la Universidad.
Poco tiempo después, se convirtió en profesor de la Facultad, donde dictó, en 1905, un curso sobre filosofía natural con el título de Correlación de las ciencias naturales. Al mismo tiempo, desarrollaba distintas actividades relacionadas con su profesión en el Ministerio de Agricultura.
En 1919, inmediatamente después de la creación de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de La Plata, Herrero Ducloux fue elegido decano de la misma. Fue él, además, quien propuso el uso de las hojas de roble como el distintivo que identifica a la Universidad Nacional de La Plata.
También fue Secretario de la Sociedad Científica Argentina (para la cual escribió, en 1923, la monografía relativa a Las ciencias químicas, que formó parte de una importante colección editada por esa institución).
Durante su carrera profesional, elaboró varios libros didácticos sobre química y física, y numerosos artículos de divulgación. También fue un habitual conferencista, con grandes dotes de divulgador, especialmente de los conocimientos químicos, aunque también tenía amplios saberes acerca de mineralogía, hidrología y otras disciplinas.
En 1937 fue galardonado con el premio “Francisco P. Moreno”, que concedía el Museo de La Plata, donde había trabajado esforzadamente, junto a otros grandes científicos de principio de siglo.
Varios años después, en 1951, se le realizó un gran homenaje a su trayectoria docente y científica en la Sociedad Científica Argentina.
El doctor Enrique Herrero Ducloux murió en 1962.