Fernando Muñoz, Defensoría de la Ciudad, en Comunas un Desafío.
Desde la AM 690 K24 nos comunicamos con el ex legislador Fernando Muñoz actual Coordinador del Programa de Atención a Inquilinos de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, programa novedoso que tiene apenas un par de años y es el único que hay en el país y que funciona en la Defensoría.
«En el tema del alquiler se están notando mucho el cambio que hay en el reclamo, la gente que se acerca a la Defensoría; hasta el año pasado había una tendencia mayor en lo que predominaba el tema acerca de la no devolución del depósito cuando finalizaban el contrato y por lo tanto había una pelea con la inmobiliaria o con el propietario para recuperarlo o estaba presente sobre todo la cuestión del estado edilicio, hay muchos problemas teniendo en cuenta que está muy envejecido lo que es el mercado de inmueble en la Ciudad de Buenos Aires y tenés muchos problemas con el tema de humedad, quien se hace cargo de eso. Este año notamos un fuerte cambio que tiene que ver con la inseguridad de la continuación del contrato de alquiler por razones económicas, esto es gente que viene a consultar porque justo le cae el aumento semestral que tenían pactado de un 15 por ciento y andan con problemas económicos o hay pérdida de empleo entonces para ver si se puede negociar, que no le hagan el aumento que tenían previsto; mucha gente rescinde el contrato anticipadamente, no pueden terminar el contrato, o sea jóvenes que se vuelven con los padres, o grupos familiares que buscan alternativas en zonas más populosas porque no pueden seguir pagando el alquiler, gente angustiada porque fue echada del trabajo y resuelve familiarmente quizás la cuestión vivienda para rescindir anticipadamente, para terminar el contrato antes de los 24 meses sino tienen que pagar una multa de un mes.», comienza.
Y pasa a ilustrarnos sobre las situaciones diarias, «se está engrosando la villa; se está calculando que aument casi tres veces en relación al censo de 2010 la población de las villas en Ciudades, es muy loco porque en ese tema aparece una sensibilidad a veces mayor que la que se tiene para mirar a los grandes capitales que es la cuestión del alquiler en villa, la especulación; hay una tradición en la Argentina que vemos como puede ser que el tipo viva en la villa además le alquila una pieza a una persona, es estigmatizar al pobre como estafador en un país que se la pasa hablando todo el tiempo del valor dólar, de si conviene comprar lebacs o plazo fijo ¿no?. Lo que está pasando es que no hubo un ensanchamiento de las villas, las villas están creciendo para arriba porque lo que hay es una demanda que no esperaba seguramente el villero, que es la cantidad de gente que se fue desplazando ante la búsqueda de un techo que no se lo posibilita la Ciudad y se va a vivir a las villas y mantenerse más o menos cerca del lugar de trabajo
Hay otro fenómeno bastante novedoso que son los viejos mal llamados «hoteles familiares» que se dan en las Ciudad; casi ya son celdas sociales para esconder gente que está en situación de calle y los mandan ahí y muchos están cerrando también empujados por la especulación inmobiliaria por ofertas que le hacen las grandes inmobiliarias para comprar el lote y construir torres, entonces hay cierres de hoteles también, son de 20 o 30 habitaciones y esos grupos familiares se desplazan hacia la villa.»
Sobre construcción, alquiler y estadísticas agrega, «la incidencia que nosotros vimos de los créditos UVA sobre todoeen la persona que tradicionalmente alquila no fue mucho, por una cuenta bastante básica en realidad vos tenés que tener ahorrado un porcentaje importante del precio de la propiedad; necesitas 300.000 o 400.000 pesos para poner encima de la mesa para sacar el crédito hipotecario, en general el inquilino no tiene ninguna capacidad de ahorro, estamos hablando del inquilino medio de la ciudad de Buenos Aires, 10.000 pesos el promedio de las viviendas de dos ambientes con cierta antigüedad y con un promedio de ingresos oficialmente dicho por estadísticas de ciudad de 20.000 pesos de los que trabajan en blanco que son el 70 por ciento y hay un 30 por ciento que trabaja en negro, que también en general alquila entonces la capacidad es muy limitada.
Acá lo que se ha dado sí es un <boom> de compras importantes de gente que ya tenía un respaldo económico familiar y que tuvo la suerte de poder acceder al crédito hipotecario, (muchos han quedado embretados por el precio del dólar); lo que pasa es que si uno ve todas la variantes en forma conjunta dice: vivimos en una Ciudad que tiene una población en villa que se triplica, que tiene cerca de 400.000 hogares que alquilan, que tiene 1.400.000 viviendas para menos de 3.000.000 de habitantes, o sea que tiene una vivienda cada dos habitantes, que tienen muchas viviendas vacías, que el precio de la vivienda está dolarizado desde 1976, (cuando salió el primer aviso en el diario La Nación que una vivienda se ofrecía en dólares), digo si uno ve todas la variantes la Ciudad asfixia al que no tiene capacidad de ahorro de acuerdo a sus ingresos o que heredó una propiedad de su familia, es un tema digamos ya múltiple, en una Ciudad que hace 40 años la tendencia general era ser propietario porque se venía de una tradición muy fuerte del peronismo, cuando se pasó prácticamente del 32 o 33 por ciento que había de propietarios en la Ciudad de Buenos Aires en el año 1945; en el censo de 1960 ya había superado el 52 por ciento, una ciudad con muchos propietarios y con relación al inquilino, eran inquilinos de mucha cercanía, esto es el propietario que tenía una propiedad más que la alquilaban o estaba la pieza que alquilaban en el P.H. arriba, uno conocía al dueño y el dueño al inquilino, más o menos se podía acordar bastante bien el alquiler ahora esta mucho más empresarializado.»
Nos informa, «lo que se construye, los edificios nuevos, los inquilinos que vienen y nos comentan que los edificios nuevos están sin final de obra, con problemas con la empresa eléctrica porque considera que se está comercializando la luz que en realidad cuando el edificio tiene luz de obra, que es un sólo medidor que puso la empresa para los obreros en el momento que empezaron a construir, y sin embargo lo está repartiendo con todos los departamentos, toda esa problemática nueva son problemáticas de edificios que tienen dos o tres dueños.»
«La tendencia mundial es la enorme renta que tienen los grandes capitales que ya no saben donde ir, porque se les terminó la tierra para comprar como pasa en la Patagonia y fueron por la tierra urbana, fueron por las ciudades, en realidad es el fenómeno mundial, es lo que cada tanto es tema de conversación entre nosotros; es la gran diferencia que hay entre un grupo muy chico de familias que tienen por ejemplo el 70 por ciento del capital mundial, es esa diferencia mundial entre los pocos ricos que quedan y la gran mayoría de empobrecimiento que hay. Vuelcan ese dinero a inversiones en las ciudades, entonces cambio la relación de vivienda, la vivienda antes se pensaba como un derecho ahora es un negocio, es una inversión más de estos capitales.», señala.
Lo consultamos por una ley que está en Diputados que tiene estado parlamentario, pero no se pudo tratar, es un proyecto de ley para modificar distintos puntos en beneficio del inquilino, en cuanto al precio precisamente, «tiene media sanción la ley, fue sancionada en el Senado en noviembre del 2016, se logró una sanción unánime, no se opuso ningún bloque, pasó a Diputados y todavía está ahí, está estacionada. A lo que se refiere esta ley es a ordenar minimamente el precio que está totalmente liberado, hoy te pueden pedir, (como nos preguntan todo el mundo todo el tiempo) termino con 8.500 pesos el contrato y me están pidiendo 40 por ciento más para empezar el contrato nuevo, no puede ser, ¿cuál es la ley que me protege? y la respuesta es <no lamentablemente ninguna, está liberado el precio te pueden cobrar lo que quieran>, algunos argumentos son por la inflación o que tienen mucha gente esperando para alquilar, o que la renta es baja; siempre digamos para las grandes cámaras de propietarios, de propiedad horizontal o las inmobiliarias la renta es baja desde hace 100 años que la renta es baja, más todavía si los departamentos aumentan en dólares una brutalidad y a vos te cobran el alquiler en pesos y te dicen <no me conviene lo que te estoy cobrando>, y uno le contesta <vos tenes una renta grande, yo te mantengo el departamento porque soy el que vive, te hago el mantenimiento y vos vas ganando no solo lo que yo te doy,sino lo que aumenta el valor en dólares de la propiedad>.
Lo que plantea la ley es que sea anual el aumento en los contratos de alquiler con un índice entre la variación de precios del IPC y las paritarias que ese porcentaje promedio sea el que se pueda aumentar en forma anual, también plantea algo que es de sentido común pero que lamentablemente el Código Civil no lo explícita que te devuelvan el depósito de garantía actualizado como vos tenés que ir pagándole el alquiler, como te ponen en el contrato con un 15 por ciento por semestre, empezás con 8.000 pesos el alquiler y dentro de dos años, y si te lo devuelve, el tipo de da los 8.000 pesos de depósito y vos en realidad estás pagando 12.000 o 13.000 pesos de alquiler.»
Y finaliza asegurando, » creo que entramos en una etapa de <emergencia habitacional>, se están multiplicando mucho más los desalojos, porque como te dije anteriormente hay mucha gente que encuentra en la casa de un familiar una posibilidad digamos alternativa, hay otros que no encuentran nada porque no tienen nada y terminan con un juicio de desalojo; esto se ve cada vez más, va a llegar a algún punto que se va a tener que plantear algún tipo de regulación porque sino va a ser imposible; lo más dramático es que la cuestión de la vivienda es lo último que se comenta, uno puede hablar de que perdió la obra social privada que tenía y ahora se atiende en una del Sindicato, uno puede hablar del colegio y se manda a los hijos a una escuela pública que es muy buena porque tuvo suerte, de la vivienda es muy difícil que uno diga <mira a pesar de que vos ves que yo estoy bien vestido, que vivo en un barrio más o menos lindo, tengo un departamento que parece de clase media me estoy cagando de hambre>, eso es lo último que uno se entera, pero esta situación la vemos diariamente porque la incidencia histórica que tuvo el alquiler en los ingresos siempre no podía pasar del 25 por ciento de los ingresos y hoy te digo que está superando el 50 por ciento.»
Por último añade, «se ve más gente en la calle, lo que ha cambiando además de la cantidad de la gente que está viviendo en la calle, es la cantidad en muchos casos con muebles, no es la gente que tiene nada más una bolsa, es gente que tiene colchón, algunos tienen un mueble chiquito se nota que es gente desalojada, que tenía hasta hace poco algo propio y que ahora directamente lo tiene ahí en la calle; uno va por Paseo Colón por la parte de la recova y son pequeñísimos <habitat> en el medio del frío este terrible que hay en Buenos Aires pero se nota que es gente que sufrió desalojos.»