Día Internacional del Actor
El actor es aquella persona capaz de trasladarte de época, de situación, de hacerte reír, llorar.
Hoy en día podemos disfrutar de muchas y muy variadas producciones formadas por grandes actores.
Para encontrar el origen del Día del Actor nos tenemos que remontar al siglo III.
Ginés de Roma era un actor romano que realizaba sus performances en diferentes teatros.
En una de sus obras en la que estaba presente el Emperador Diocleciano, Ginés realizó una parodia sobre el bautismo.
Cuenta la leyenda que, mientras Ginés representaba una comedia ante el emperador Diocleciano, tuvo la ocurrencia de parodiar el acto del bautismo, mismo que había visto días antes, pero se produjo un milagro y al recibir el agua, se convirtió al cristianismo.
Luego, exhortó a los presentes a recibir el sacramento y se produjo en el Emperador el mismo acto de fe. Sin embargo, los políticos presentes consideraron la representación como una blasfemia y condenaron a Ginés a recibir torturas y luego, a la decapitación.
Ginés se convirtió en el santo teatral, porque encontró a Dios en pleno ejercicio de su profesión y por defenderla encontró el martirio y la muerte. Por tal motivo, se instituyó el 26 de agosto como “Día del Actor”.
San Ginés es representado con una máscara que es el símbolo del teatro y un instrumento de cuerdas. Ha sido fuente de inspiración para grandes artistas como: Lope de Vega, quien escribió la tragicomedia «Lo fingido verdadero», basándose en su historia; «El verdadero San Ginés», del dramaturgo francés Jean de Rotrou; y el drama, «El comediante atrapado» en su comedia de Henri Gheon.