Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo
Superar la división entre las culturas es urgente y necesario para la paz, la estabilidad y el desarrollo.
La cultura, en su rica diversidad, posee un valor intrínseco tanto para el desarrollo como para la cohesión social y la paz.
La diversidad cultural es una fuerza motriz del desarrollo, no sólo en lo que respecta al crecimiento económico, sino como medio de tener una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora. Todo esto está presente en las siete convenciones de la cultura, que proporcionan una base sólida para la promoción de la diversidad cultural. Esta diversidad es un componente indispensable para reducir la pobreza y alcanzar la meta del desarrollo sostenible, gracias, entre otros, al dispositivo normativo, hoy día ya completo, elaborado en el ámbito cultural.
Simultáneamente, el reconocimiento de la diversidad cultural – mediante una utilización innovadora de los medios y de los TIC en particular – lleva al diálogo entre civilizaciones y culturas, al respeto y a la comprensión mutua.
La Declaración Universal de la UNESCO sobre la Diversidad Cultural se aprobó en 2001 y a continuación, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 21 de mayo como el Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo, a través de su resolución 57/249 del mes de diciembre de 2002.
El objetivo de esta efemérides es crear conciencia de la importancia de respetar al prójimo y aceptar la multiculturalidad como un motor de avance en la sociedad, lograr que todas las personas nos comprometamos y apoyemos la diversidad mediante gestos reales día a día y combatir la polarización y los esterotipos para mejorar el entendimiento y la cooperación entre las personas de diferentes culturas.
Cada día, cada uno de nosotros podemos hacer algo para ayudar a personas de otras culturas.