Paro de colectivos
La medida de fuerza en reclamo de «mayor seguridad» tras el asesinato en Villa Madero del chofer de la línea 56 Leonardo Paz, de 22 años, comenzó al mediodía y se extenderá hasta la medianoche. Impactará en todas las líneas del área metropolitana bonaerense que llegan hasta Capital Federal. El gobierno provincial convocó a la UTA a una reunión para el lunes.
«No soportamos más la inseguridad con que nos tenemos que desempeñar a diario», sostuvo el titular de la UTA, Roberto Fernández, y pidió «a las autoridades» que «protejan como corresponde a los trabajadores de los colectivos».
En tanto, el ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, convocó a los representantes de la UTA para el lunes «para escuchar cuáles son las necesidades del sector en materia de seguridad a los trabajadores», ante el asesinato de un chofer de la línea 56 en un intento de robo, que derivó en un paro por 12 horas a partir de este mediodía.
Así lo señaló a Télam el vocero del Ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Biondi, quien sostuvo que «estamos trabajando para abordar esta problemática, por eso el ministro los convocó a una reuniún para el próximo lunes». «El objetivo es atenderlos y escuchar cuáles son las necesidades del sector en materia de brindar mayor seguridad a los trabajadores», agregó.
El paro total afectará a todas la líneas interurbanas de pasajeros que tienen origen o destino en la provincia de Buenos Aires, por lo que la huelga impactará también en la Ciudad de Buenos Aires. «Los gobernantes de la provincia sólo se dedican a postularse para la Presidencia y se desentienden de la seguridad de los trabajadores», criticó Fernández.
El hecho ocurrió esta madrugada en el interno 1030 de la la línea 56 de colectivos, perteneciente a la empresa DOTA, y la víctima es un joven de 22 años llamado Leonardo Paz, quien trabajaba como chofer desde hacía poco tiempo. Según los investigadores, todo comenzó cuando al menos dos jóvenes subieron al colectivo en el cruce de la calle Boulogne Sur Mer y la colectora de la autopista Riccheri, en el barrio de Villa Celina, partido de La Matanza, en el oeste del conurbano bonaerense.
Allí, los delincuentes amenazaron a unos diez pasajeros y comenzaron a exigirles el dinero y los objetos de valor que portaban en ese momento. «Iban uno por uno y apenas les robaban todo lo que tenían los hacían bajar del colectivo», dijo a Télam un jefe policial que participa de la investigación del hecho. Entre los pasajeros se hallaba un efectivo de la Policía Federal que se encontraba sentado en el último asiento y estaba vestido con ropas de civil.
Al llegar a él, ya no se encontraban otros pasajeros dentro del colectivo y el policía decidió identificarse y extraer su arma reglamentaria. En ese momento, los delincuentes comenzaron a disparar y aprovecharon para bajar del colectivo con intenciones de escapar. «El policía no alcanzó a disparar arriba del colectivo, pero los delincuentes bajaron y siguieron disparando. Allí fue cuando ihieron al colectivero», explicó el jefe policial consultado.
El chofer fue auxiliado por el propio policía que se hallaba junto a él y fue trasladado de urgencia al Hospital Piñeyro, donde fue atendido durante varias horas hasta que finalmente murió como consecuencia de las heridas. Policías de la comisaría de Villa Madero concurrieron al lugar a los pocos minutos y realizaban esta mañana un intenso operativo en busca de los delincuentes.
En tanto, choferes de las líneas 56 y 91 realizaban esta mañana una medida de fuerza en reclamo de seguridad y justicia por el compañero asesinado. El hecho es investigado por persona de la Jefatura Distrital La Matanza Noreste, que trabaja bajo las órdenes del fiscal de Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza, José Luis Maroto.
Fernández se quejó también por la «falta de respuesta a las innumerables denuncias realizadas por la UTA para reclamar mayores medidas de seguridad» para los colectiveros y puntualizó que «el problema de la seguridad en el conurbano ha desbordado totalmente a la Policía y a la Gendarmería, que hacen todo lo está a su alcance pero no se ha podido lograr la contención del delito».