Reclamos de los Clubes de Barrio.
Los clubes de barrio reclaman al Gobierno que extienda la suspensión de los cortes en los servicios de electricidad o gas por falta de pago durante la pandemia.
Estaban protegidos por un decreto de necesidad y urgencia que venció el 31 de diciembre y no fue renovado.
Apenas el 10 por ciento está en condiciones de pagar al día las tarifas.
Un club cerrado, sin consumo de gas y con pileta, paga mensuamente entre 35 mil y 40 mil pesos de base.
Existe una ley de Clubes de Barrio que fue sancionada en 2014 y resolvería muchos de nuestros problemas, pero nunca se reglamentó y por lo tanto no entró en vigencia.
La ley otorga una serie de asignaciones a los clubes; aunque con una tarifa diferencial en los servicios público.
En la medida en que situación epidemiológica lo permite, los clubes de barrio vienen reabriendo sus puertas, con protocolos de cuidado. Por ejemplo, en las colonias de vacaciones las piletas se están habilitando con un máximo de 8 personas por andarivel. Las restricciones dependen, en general, de las decisiones de cada municipio.