Día del Guardaparque.
Guardianes de la naturaleza, los guardaparques del mundo constituyen una casta de valientes que realizan tareas riesgosas pero vitales para proteger a la naturaleza, sus ecosistemas y su biodiversidad.
La Federación Internacional de Guardaparques, que representa a más de 45 países adoptó el 31 de julio de 1992 como Día Internacional del Guardaparque, y cada tres años organiza un congreso mundial para evaluar la situación de estos conservacionistas.
Estos manejadores de vida silvestre o técnicos de campo son tenaces defensores del patrimonio natural, cultural y recreacional del planeta que, mediante la utilización de diferentes medios y técnicas, ya que sensibilizan y educan a la población sobre la importancia del uso sostenible de los recursos para beneficio de las generaciones presentes y futuras.
Los guardaparques desarrollan trabajo científico para delimitar ecosistemas y ecorregiones, realizan diversos estudios de fauna y flora, para resguardarlas y conservarlas, son territorios terrestres, marinos e insulares donde la naturaleza se mantiene en estado más prístino, y su biodiversidad, que en muchos casos preserva especies endémicas de flora y fauna, que a veces se encuentra en peligro.
Abogar por los guardaparques es interceder por la humanidad entera y por el planeta mismo, por lo cual estos servidores públicos merecen un reconocimiento especial en el Día Internacional del Guardaparque.
Dependiendo de la legislación de cada país, los guardabosques están conformados en cuerpos especializados y disciplinados para el resguardo de áreas verdes protegidas, bosques y parques nacionales.
Algunas de las actividades y funciones que desempeñan son las siguientes:
- Fungir como administradores de parques nacionales y estatales.
- Prevención y extinción de incendios forestales.
- Capacidad de respuesta ante emergencias.
- Orientación y asistencia a los visitantes de parques nacionales, organizando visitas y excursiones guiadas.
- Patrullajes y recorridos por la zona, así como la instalación y supervisión de puestos fijos y móviles.
- Dar charlas educativas a escuelas, comunidades y campamentos.
Pero no cualquiera puede ejercer esta dedicada labor.
Para ser un guarda forestal o guardabosque debe cumplir con las siguientes habilidades, siendo un requisito fundamental tener disposición y vocación de servicio:
- Conocer la extensión del área protegida, bosque o parque nacional.
- Estar en excelente condición física.
- Saber conducir, nadar, montar a caballo y bucear.
- Conocer las políticas, normas y legislación vinculada al área protegida, bosque o parque nacional.
- Sólidos conocimientos sobre manejo de incendios, primeros auxilios.
- Conocer e identificar las especies de flora y fauna de la zona, así como las especies en peligro de extinción.
- Manejo cartográfico del área protegida, bosque o parque nacional.