Desgarro Muscular.

Publicado: 08 jun 2023
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El desgarro muscular es la distensión o rotura de un músculo o un tendón por estirar o contraer demasiado el tejido muscular. Los músculos que suelen verse más afectados son los de las piernas y los de la parte baja de la espalda.

 

El desgarro muscular (también denominado tirón muscular o rotura muscular) se produce cuando un músculo o un tendón (el tejido resistente que une el músculo con el hueso) se estira demasiado o se rompe. Por lo general, el desgarro muscular ocurre durante el ejercicio o las actividades deportivas, como por ejemplo con el desgarro de gemelo. También puede ocurrir al levantar objetos pesados, que puede dar un tirón muscular de espalda o desgarro muscular de brazo.

El desgarro muscular se produce cuando un músculo o un tendón se estira demasiado o se rompe.
El desgarro muscular suele ocurrir durante el o al levantar objetos pesados.

El desgarro muscular de pierna, de la parte baja de la espalda y el desgarro muscular del brazo suelen ser el tipo de desgarro más común. Los músculos que se lesionan con mayor frecuencia son los siguientes:

Desgarro muscular en el gemelo (músculos de la pantorrilla) – un desgarro de gemelo o de la pantorrilla es una rotura de los músculos posteriores de la parte baja de la pierna. La función de los músculos de la pantorrilla es ayudar a levantar el talón.

Desgarro muscular en el muslo (Cuádriceps) – un desgarro del cuádriceps es una ruptura muscular delantera del muslo. La función principal del cuádriceps es ayudar a enderezar la rodilla.

Desgarro muscular en el muslo (Músculos isquiotibiales) – otro tipo de desgarro en la pierna es el de los músculos isquiotibiales cuando se produce una rotura de los músculos posteriores del muslo. La función principal de los músculos isquiotibiales es ayudar a flexionar la rodilla.

Desgarro muscular en la espalda (Músculos paravertebrales )– un desgarro lumbar o en la parte baja de la espalda es una rotura de los músculos de la parte baja de la espalda. La función principal de los músculos paravertebrales es sostener la columna vertebral y soportar el peso de la parte superior del cuerpo.

Tipos de desgarro muscular

Según la gravedad de la lesión, el desgarro muscular puede clasificarse de la siguiente manera:

  • De primer grado – daños leves de las fibras musculares
  • De segundo grado – rotura muscular parcial de las fibras musculares
  • De tercer grado – rotura muscular total de las fibras musculares

Si has sufrido un desgarro muscular leve (de primer grado) puedes tener la zona sensible y el músculo tenso. Con un desgarro leve, quizás puedas continuar con tus actividades.

Con los desgarros musculares más graves (es el desgarro muscular de grado 2 y de tercer grado) es más fácil saber si se tiene un desgarro muscular, ya que causan un dolor muscular considerable. Cuando hay un desgarro muscular se siente que el músculo se está más rígido y se inflama la zona que rodea la lesión. El dolor empeora con el movimiento, por lo que te impedirá continuar con tus actividades. Incluso puedes tener algunos moretones alrededor de la zona lesionada.

Los desgarros musculares más graves causan un dolor muscular considerable.
El músculo se siente rígido y se inflama la zona que rodea la lesión.

Si has sufrido un desgarro muscular de tercer grado, el dolor será agudo, tendrás mucha inflamación y perderá la funcionalidad muscular. Si el desgarro muscular es considerable, pudiera haber una protuberancia o una desigualdad que antes no estaba presente en la zona lesionada.

El desgarro muscular ocurre cuando el músculo se contrae al estirarse. Esto puede suceder al correr, saltar o patear.
Hay más probabilidades de que se desgarro de un músculo en los siguientes casos:

  • el calentamiento es demasiado breve
  • no deja pasar suficiente tiempo de recuperación entre una y otra sesión de entrenamiento
  • los músculos ya están tensos o rígidos
  • los músculos están cansados o fatigados
  • los músculos están débiles

Tu médico o un fisioterapeuta (un profesional de la salud especializado en mantener y mejorar el movimiento y la movilidad) puede diagnosticar el desgarro muscular. Éste determinará exactamente cuáles son los tejidos musculares que están dañados, el alcance del daño y cuánto tiempo tardará en sanar el desgarro muscular.

El tiempo de recuperación de un desgarro muscular puede variar significativamente en cada caso, pero en líneas generales si se está aplicando una rehabilitación adecuada, los tiempos aproximados son:

  • El desgarro muscular de Grado 1 más leve puede tardar entre 8 y 10 días en curarse
  • El desgarro de Grado 2 o moderado puede llegar a durar entre 4 o 6 semanas
  • El desgarro muscular de Grado 3 puede durar de uno a varios meses, siempre dependiendo de la gravedad de la lesión y cómo se cura el desgarro muscular al recibir un tratamiento correcto

¿Qué hacer en caso de desgarro muscular?

Un desgarro muscular leve o de primer grado puede tratarse rápida y fácilmente en casa, con el método PRICE (por sus siglas en inglés).

  • (Protect) Proteger  la lesión de daños ulteriores.
  • (Rest) – Reposar durante las primeras 48 a 72 horas; posteriormente, reanudar poco a poco el movimiento para no perder demasiada fuerza muscular.
  • (Ice packs) Aplicar bolsas de hielo o una bolsa de guisantes congelados envuelta en una toalla sobre la zona lesionada, para reducir la inflamación y los moretones. Nunca se aplique el hielo directamente sobre la piel, porque puede ocasionarse una «quemadura por hielo»; coloca un paño entre el hielo y la piel.
  • (Compress) Comprimir la zona con vendas para contener la lesión y ayudar a reducir la inflamación.
  • (Elevate) Elevar la zona lesionada por encima del nivel del corazón para controlar la inflamación. Mantener la zona contenida, e intentar mantenerla lo más elevada posible hasta que disminuya la inflamación.

También es bueno para los desgarros musculares y la prevención de desgarros llevar una dieta equilibrada rica en vitaminas, proteínas, omega 3 y antioxidantes, así como mantener una buena hidratación. Algunos alimentos que ayudan a la recuperación de lesiones musculares son:

  • Frutas y verduras frescas, especialmente los cítricos y kiwi, ricos en Vitamina C
  • Pescado azul y las nueces, ricos en omega 3 que tiene propiedades antiinflamatorias
  • Aceite de oliva, aguacate, frutas y verduras para asegurar la ingesta de antioxidantes
  • Carne, pescado, huevos y lácteos ricos en proteínas

También es importante evitar abuso de alcohol, drogas o corticoesteroides (para el dopaje deportivo) ya que pueden favorecer la deshidratación grave y la aparición de un desgarro muscular.

Si la lesión es muy dolorosa y la inflamación no cede, consulta a un médico o un fisioterapeuta para que te explique cómo curar un desgarro.

Medicamentos para el desgarro muscular

Los analgésicos de venta libre, como el paracetamol o el ibuprofeno, pueden aliviar el dolor leve o moderado de un desgarro muscular. Si el dolor es agudo, tu médico de cabecera pudiera recetarte analgésicos más fuertes. Además de aliviar el dolor, los analgésicos pueden reducir la inflamación y la hinchazón. Lee siempre el prospecto de información al paciente que viene con el medicamento, y si tienes preguntas, consulta a tu médico o farmacéutico.

Cirugía

Si la lesión del desgarro muscular es grave, quizá requiera cirugía para reparar el músculo o ligamento desgarrado, seguida de un largo período de reposo y recuperación.

Fisioterapia

Si la lesión es grave o vuelve a repetirse, es posible que la fisioterapia te ayude a fortalecer el músculo o ligamento dañado. El tratamiento a través de ejercicios de fisioterapia es muy recomendable para la recuperación de un desgarro muscular.

Tu médico de cabecera pudiera referirte a un fisioterapeuta, o tú puedes consultar a un fisioterapeuta privado. El fisioterapeuta desarrollará un programa de ejercicios de rehabilitación, para que tus músculos se vayan fortaleciendo y estirando gradualmente. Estos ejercicios variarán según el tipo y la gravedad de la lesión que tengas. El fisioterapeuta también puede usar diversas técnicas para que la lesión se sane más rápido.

Deberás dejar sanar el músculo por completo antes de empezar a hacer ejercicios de nuevo para prevenir que se produzca un desgarro muscular de repetición.

Puedes reducir el riesgo de desgarro muscular haciendo un calentamiento y un enfriamiento completos antes y después del ejercicio, respectivamente. La razón del calentamiento es darle tiempo al cuerpo para prepararse mental y físicamente para el ejercicio que vas a realizar. Éste deberá incluir ejercicio cardiovascular seguido de estiramiento.