Día del Ferroviario.
El Ferrocarril Oeste de Buenos Aires, inaugurado en la ciudad de Buenos Aires el 29 de agosto de 1857, fue el primero que se construyó en el país, con capitales nacionales y el principio de lo que sería uno de los diez países con mayor kilometraje de red ferroviaria del mundo.
Sin embargo, los gobiernos liberales y su política de entrega, fueron dejando en manos extranjeras el manejo de los ferrocarriles.
Primeramente fueron los capitales ingleses y franceses quienes desarrollaron los distintos ramales para acceder a los puertos de Buenos Aires, Rosario, Bahía Blanca, Mar del Plata y Neuquén.
En el año 1870 la red contaba con 772 kilómetros de vías, para 1900 ya estaba en los 16.500 kilómetros de vías, en 1915 contaba con 33 mil kilómetros y para 1947 ya eran 42.700 kilómetros de vías, de los cuales 29.000 habían sido construidos por capital ingleses y franceses.
Capitales principalmente de origen británicos que financiaban el crecimiento de la red ferroviaria, pero a su vez condicionaban el desarrollo de la industria nacional. Las empresas que participaban en el negocio eran en su gran mayoría británicas y pertenecían al mismo grupo de intereses que invertían en la red ferroviaria.
Con la Nacionalización se rompen los lazos de dependencia que imponía la política Británica en el Río de la Plata, un año después, el 1º de marzo de 1948, una multitud concurrió a la estación Retiro para festejar la nacionalización de los ferrocarriles, que no fue solamente una transferencia de una administración a otra, sino que representaba un hecho soberano e independiente que fortalecía la identidad nacional.