Día del Sistema Braille.
Cuando en 1824, el pedagogo francés Louis Braille (Coupvray, Francia, 4 de enero de 1809 – París, Francia, 6 de enero de 1852) creó el método que hoy lleva su nombre, nunca imaginó que muchos años después sería implementado a nivel planetario, abriendo un mundo de posibilidades a quienes tienen impedida la visión.
La historia de Louis Braille está vinculada directamente a la problemática de la ceguera, ya que él mismo perdió la vista a los tres años en un accidente en el taller de talabartería de su padre. Su condición no lo apartó de la escuela, convirtiéndose en un caso ejemplar por lograr ser el primero de su clase y conseguir una beca para el Institute National des Jeunes Aveugles de París, una de las escuelas para chicos ciegos más prestigiosas del mundo.
Fue en su época de estudiante que Braille comenzó a desarrollar un código táctil que podría permitir a las personas ciegas leer y escribir rápida y eficientemente. Su inspiración la encontró en Charles Barbier, un oficial del ejército que en 1821 presentó en el Institute National des Jeunes Aveugles un nuevo sistema de lectura y escritura táctil que podía introducirse en el programa educativo del centro. Su invento, llamado Sonography, funcionaba al colocar sobre una superficie plana rectangular doce puntos en relieve que, al combinarse, representaban sonidos diferentes.
El trabajo del joven Braille fue más allá. Comenzó a realizar pruebas más sofisticadas con diferentes posibilidades y combinaciones hasta que encontró la fórmula para reproducir la fonética básica con solo seis puntos en relieve. En 1824, con la tarea casi acabada, Braille presentó su trabajo a sus compañeros. Igualmente, refinar el sistema llevó toda la vida de Braille, aunque conjugó esta tarea con su trabajo como profesor en el Instituto para no videntes y su gran vocación musical.
Cuando Louis murió, su método no tuvo gran repercusión entre los maestros. El tiempo fue el responsable de demostrar que el Sistema Braille era un invento revolucionario, por eso terminó por adaptarse para uso en casi todos los idiomas del mundo.
El Braille es el sistema de lectura y escritura universalmente adoptado en los programas de educación para personas no videntes o con disfunciones visuales severas. Brinda no sólo acceso a la alfabetización, sino también a la composición musical y a la informática.
Este método de representación del alfabeto, números y notación musical, utiliza celdas con seis puntos en relieve, que al ser tocadas con las terminaciones nerviosas de las yemas de los dedos puede enviar información al cerebro.
Los símbolos se representan con una serie de seis puntos dispuestos en dos columnas paralelas de tres puntos cada una. Con ellos se logran 64 combinaciones diferentes, dispuestas dentro de un espacio que es igual para todos, donde se codifican todas las letras, signos de puntuación, notación musical y simbología matemática.
Hace casi 200 años, el sistema de lecto-escritura implementado estaba basado en signos de uso corriente con relieve. Pero por su complejidad, tamaño e implementación, el aprendizaje era sumamente lento.