Día Internacional de la Juventud.
El Día Internacional de la Juventud es una celebración anual que, desde el año 1999, tiene por objetivo principal reconocer el papel fundamental de los y las jóvenes en la sociedad. Además, se promueve su participación activa en los asuntos mundiales, ¡porque el mundo es también de ellos!
Se celebra cada año el 12 de agosto, fecha designada por Naciones Unidas tras una conferencia mundial sobre Ministros de la Juventud celebrada en Lisboa en el año 1998.
Puede ser casualidad, pero el hecho de que este día comience a celebrarse con el principio de un nuevo milenio, podría tener mucho significado… Desde ese año, cada 12 de agosto se contempla como una oportunidad para la unión y la participación en diferentes actos y eventos.
Esta fecha especial nos da una excelente oportunidad para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta la juventud. Pero también es un altavoz muy potente para destacar, a nivel mundial, la importancia de invertir en ella: en su desarrollo, su progreso y su bienestar.
La mitad de los habitantes del mundo tienen menos de 30 años. Y está previsto que para finales de 2030 los jóvenes representen el 57% de la población mundial. Por eso es más importante que nunca, como hace Ayuda en Acción, trabajar con, por y para la juventud.
El objetivo principal del Día Internacional de la Juventud es generar conciencia sobre los problemas y desafíos que enfrenta la juventud en todo el mundo. Cada año, la ONU elige una temática a través de la que se trabaja para reconocer y promover el potencial de la juventud como agentes de cambio, en diferentes aspectos. Sin duda, se trata de un día ideal para fomentar la participación juvenil en la toma de decisiones y para abogar por políticas y programas que les beneficien.
El hecho de que la juventud tenga su propia voz para atajar los problemas que le afectan es importante no solo para ella, sino para el resto de la sociedad. Y es que, según cifras de la ONU, el 69 % de la población mundial declara que si a los y las jóvenes se les escuchase más a través de las instituciones y espacios públicos, los sistemas políticos tendrían un amplio margen de mejora.
El futuro es incierto, sobre todo para la juventud, que se enfrenta a importantes desafíos que tienen que ver con el acceso a la educación, la falta de empleo (y de empleo digno), la violencia o la salud mental, entre otros. Y gracias al Día Internacional de la Juventud se pone el acento en estos retos y se invita a proponer soluciones que permitan a la juventud desarrollar su potencial para generar el cambio social que necesitamos.