Día Internacional de la Partera.

La Organización de las Naciones Unidas declara el 5 de mayo como el Día Internacional de la Partera.

En esta fecha, se destaca la importante función que las parteras desempeñan en la salud de las madres, los niños y sus familias.

Para bien de la atención neonatal y perinatal, la pandemia de COVID-19 puso sobre la mesa el rol fundamental de las parteras para la prevención de contagios y la atención segura y oportuna a las mujeres durante el embarazo, parto y puerperio o posparto de mujeres sanas, con embarazos saludables.

El desafío de los sistemas de salud en esta emergencia sanitaria es equilibrar las demandas para responder, al tiempo que se trata de mantener la prestación de servicios de salud esenciales, como lo son la atención al embarazo y al nacimiento.

De acuerdo con datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), el trabajo con las parteras que tienen la formación adecuada, según los estándares internacionales, podría reducir el uso de anestesia, las cesáreas innecesarias y garantizar una atención digna y respetuosa y un vínculo estrecho y de mayor confianza con las mujeres.

El modelo de la atención al embarazo y al nacimiento por parte de estas profesionales en el mundo representa una mejora en el acceso universal a la atención en salud sexual, reproductiva, materna y neonatal de calidad y centrada en la mujer, pues se trata de un derecho humano.

A pesar de que en nuestro país la tradición del conocimiento y la práctica de la partería es ancestral, es un modelo que ya se ha profesionalizado. Algunos datos importantes a considerar para que el modelo de atención por parteras se incorpore con buenos resultados y sigamos celebrando el Día Internacional de la Partera.

–La atención a la salud sexual, reproductiva, materna y neonatal de buena calidad y centrada en la mujer es un derecho universal.

–Invertir en personal de partería competente es una estrategia de bajo costo, efectiva y centrada en la mujer para mejorar la calidad y la continuidad de la atención de la salud sexual, reproductiva, materna y neonatal.

–Las parteras, cuando son competentes y cuentan con el apoyo del sistema de salud pueden prestar el 87% de todos los servicios esenciales de salud sexual, reproductiva, materna y neonatal.

–Las parteras profesionales son una pieza clave para la salud, no solo durante el embarazo, el parto y el postparto, sino en general en todo el ciclo de salud sexual y reproductiva de las adolescentes y las mujeres. Por eso la importancia de que exista un Día Internacional de la Partera.

–El modelo de partería profesional brinda a las mujeres mayor seguridad, libertad y conocimiento. Se da un vínculo estrecho de confianza y una mejor comunicación, lo que disminuye el estrés y tiene un impacto emocional, psicológico y ?siológico muy positivo.

–Las parteras profesionales tienen un mayor impacto en las comunidades, por tanto, son aliadas fundamentales para lograr la salud materna de las mujeres y de los recién nacidos y para proveer atención segura a las mujeres que viven en situación de pobreza o sin acceso a los servicios adecuados para recibir atención durante el embarazo y el parto, además de que por lo general pertenecen a la comunidad que atienden y conocen sus necesidades básicas.

–En 2015 en todo el mundo se estimaron unas 303,000 muertes de mujeres durante el embarazo, el parto o el postparto. De esas mujeres, un 99% sucede en países en desarrollo y la mayoría de ellas podrían haberse evitado. Cada día mueren en el mundo unas 830 mujeres por complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto. La COVID-19 aumenta hasta 50% el riesgo de complicaciones durante el embarazo.

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