Día Mundial de la Hemofilia
El 17 de abril se conmemora el día Mundial de la Hemofilia para concientizar a la población de ésta enfermedad que afecta 1 cada 5 a 10.000 nacimientos para hemofilia A y a 1 cada 30 a 50.000 nacimientos para Hemofilia B.
La Federación Mundial de Hemofilia comenzó con la celebración en el año 1989, en honor de su fundador, Frank Schnabel, hombre de negocios canadiense, nacido con hemofilia un día 17 de abril.
La Hemofilia es el nombre de un grupo de afecciones que ocurren cuando la sangre tarda mucho tiempo en coagular produciendo trastornos hemorrágicos (sangrado) producto de la falta o insuficiencia de un factor de coagulación.
El factor de coagulación es una proteína en la sangre que controla el sangrado.
Las personas con hemofilia nacen con disminución o ausencia de los factores VIII o IX.
Tipos de Hemofilia
- Hemofilia A: es el tipo más común de Hemofilia. Esto quiere decir que la persona no tiene suficiente factor VIII (factor ocho).
- Hemofilia B: un tipo menos común de Hemofilia. Esta persona no tiene suficiente factor IX (factor nueve).
El resultado es el mismo para la Hemofilia A y B: sangrado por un tiempo mayor de lo normal.
Síntomas
Las personas con Hemofilia A y B pueden padecer hemorragias internas o externas.
Estos pueden producirse dentro de los músculos y las articulaciones, tales como rodillas, codos y tobillos, músculos del brazo y muslo. Si hay sangrado repetido en una misma articulación, esta puede dañarse y doler, causando Artritis.
Los síntomas suelen ser dolorosos, provocando rigidez, discapacidad por daños severos pudiendo llegar, en algunos casos, al fallecimiento del afectado.
Diagnóstico
La Hemofilia puede diagnosticarse tomando una muestra de sangre y midiendo la cantidad de factor de coagulación presente en el plasma.
Tratamiento
La Hemofilia no tiene cura, pero existen tratamientos disponibles sumamente eficaces.
El tratamiento de Hemofilia se hace aplicando el factor faltante en el flujo sanguíneo del paciente.
La falta de tratamiento en tiempo y forma de un cuadro hemorrágico grave y urgente en un paciente con Hemofilia A severa puede provocar secuelas mayores y permanentes.
Con tratamiento y cuidados adecuados, las personas con Hemofilia pueden llegar a la edad adulta y disfrutar de una vida saludable.