Día Nacional de los/las Afroargentinos/as
La Ley N° 26.852, sancionada el 24 de abril de 2013, instituye al 8 de noviembre como «Día Nacional de los Afroargentinos y de la Cultura afro».
La fecha elegida corresponde a la muerte de María Remedios del Valle, la afroargentina llamada por las huestes revolucionarias de Mayo como «Madre de la Patria», a quien el General Manuel Belgrano le confirió el grado de Capitana por su arrojo y valor en el campo de batalla.
Se trata de un reconocimiento histórico a la comunidad afro en la Argentina, una iniciativa promovida por la Asamblea Permanente de Organizaciones Afrodescendientes de Argentina (APOAA) a través de un Proyecto de Ley Nacional.
Sienta las bases para el desarrollo de políticas públicas, ya que la Ley determina que se debe incorporar la conmemoración en la agenda de gestión e incluir el 8 de noviembre en el Calendario Escolar para que lxs niñxs y adolescentes aborden esta temática.
Esta conmemoración fortalece el reconocimiento de la diversidad cultural en nuestro país, resignifica la presencia de la cultura afro en el presente y permite hacer colectivas las luchas contra el racismo y toda forma de estigmatización y discriminación.
El racismo es un fenómeno social, político y cultural que se sustenta en diferentes dimensiones: institucional e individual/interpersonal; impregnando las relaciones sociales, culturales, económicas con las que se organizan nuestras sociedades. Las instituciones y las personas ejecutamos, reproducimos, en muchas oportunidades, decires con una inmensa carga racista, naturalizados e instalados en las maneras de hablar y nombrar.
En nuestro país la categoría «negro/a» tiene un espectro peyorativo más amplio que en otras latitudes, pues no se refiere únicamente a la población afrodescendiente.
Los negros, indios, negros villeros, planeros, villeros, cabecitas negras, son los afrodescendientes y los Pueblos Originarios o una mezcla de ambos.
Por eso es necesario deconstruir ese proceso de ocultamiento y visibilizar las diferencias, celebrarlas y enriquecernos a partir de ellas, mucho más aún en estos tiempos de discursos de odio y de estigmatización por parte del Gobierno Nacional.
La ESI acompaña el desafío de pensar un concepto de igualdad desde el reconocimiento de las diversidades, no solo las sexo-genéricas, sino también desde las identidades de Pueblos Originarios y africanos y nos otorga la oportunidad de reflexionar acerca de la lucha que lleva adelante esta comunidad y hacer visible la lucha de las mujeres por la Independencia.