Día Nacional del Bandoneón.
Se declaró por Ley 26.035 en el 2005, con motivo del natalicio de Aníbal Troilo.
Fue uno de los mayores bandoneonistas argentinos, también compositor y director de orquesta.
Nació el 11 de julio de 1914 en la calle Cabrera 2937, entre Anchorena y Laprida pero desde los 8 años de edad (después de la muerte de su padre) lo hizo en Soler 3280, entre Gallo y Agüero.
Troilo, que escuchaba tocar el bandoneón en los bares de su barrio, a los 10 años convenció a su madre para que le comprara uno, con el que tocó casi toda su vida.
Un año después, en 1925 (cuando tenía 11 años) realizó su primera actuación en un bar pegado al Mercado de Abasto. A los 14 años ya había formado un quinteto.En diciembre de 1930 fue contratado para formar parte del famoso sexteto del violinista Elvino Vardaro, el pianista Osvaldo Pugliese y Alfrredo Gobbi (hijo), donde tuvo como compañero a Ciriaco Ortiz, de quien Troilo más adelante se consideraría deudor.
Luego pasó por numerosas orquestas y con la propia trabajó casi ininterrumpidamente, hasta el año de su muerte.
Al morir su mejor amigo, el poeta Homero Manzi (1907-1951), entró en una profunda depresión que duró más de un año.
En su memoria compuso el tango Responso. En 1971 inauguró la plaza Homero Manzi, en conmemoración de los veinte años del fallecimiento del poeta.
Falleció el 18 de mayo de 1975 sin poder concretar su último sueño: volver a ver campeón a su querido River Plate, equipo que lograría el título luego de 18 años a los pocos días.