El BCRA Sale al Rescate de la Deuda Comercial Privada (¿Nueva Estatización?).
El Gobierno de La Libertad Avanza ofreció sus primeros servicios hacia los intereses del Gobierno norteamericano y sus empresas.
El BCRA saldrá al rescate de la deuda comercial del sector privado, a través de la emisión de un bono (deuda), suscripto en pesos y cobrado en dólares por el total de esos pasivos. Es decir, el BCRA será responsable de que esas empresas accedan al MULC, otorgándoles un bono, para cancelar deuda que en su mayoría constituyó un flujo de divisas entre empresas vinculadas.
Se trata de bonos a suscribir en pesos, a pagar en dólares, con plazo hasta el 31 de octubre de 2027 y que tendrán como nombre Bono para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal). Devengarán intereses a una tasa anual máxima del 5% a definir en el anuncio de la licitación, indicaron desde el BCRA. Antes de eso, la AFIP abrirá un registro para determinar cuánto es la deuda importadora total a solucionar.
Para el economista Claudio Lozano, con esta medida el Gobierno abrió la puerta para una nueva estatización de la deuda privada en dólares, tal como se había realizado sobre el cierre de la dictadura cívico militar.
La historia es la siguiente. Dos días antes de asumir como Presidente, la Cámara que representa los intereses de las empresas norteamericanas – AmCham- le envió a Milei una nota con un pedido expreso: garantizar el pago de las deudas que a futuro se generen por importaciones, o sea, el flujo operativo.
Y le propusieron al libertario, como alternativa a la falta de dólares, la implementación de algún instrumento que les permitiera “la cancelación futura mediante el acuerdo de un sendero de pago creíble, confiable, comprometido y finalmente respetado”.
El miércoles, Luis Caputo, ministro de Economía y Santiago Bausili, titular del BCRA, estuvieron reunidos en la Casa Rosada con el embajador Marc Stanley y un conjunto de funcionarios del Consejo de Seguridad vinculados a los temas económicos de interés para la administración Biden. “Se discutió la manera en que Estados Unidos y Argentina pueden fortalecer sus lazos de cooperación, en especial lo vinculado a las energías verdes”, destacaron desde la Embajada.
Por la tarde, el BCRA les ofreció el instrumento que estaban esperando. “En relación a las importaciones pendientes de pago, el Directorio del BCRA fijó, a través de la Comunicación A7918, los parámetros generales de uno o más instrumentos en moneda extranjera que podrán ser eventualmente suscriptos con pesos, con el objetivo de asegurar la disponibilidad de divisas en fechas y por montos específicos”, informó la autoridad monetaria a través de una comunicación oficial.
Lo que no se especificó en el comunicado tiene que ver con el origen de esos pasivos; una gran parte de esa deuda comercial corresponde a empresas de un mismo grupo, que no solo poseen capacidad financiera en el exterior sino, también, dólares propios. Para Lozano, se trata de una suerte de inicio de “privatización” de esos pasivos.
“Lo quieren hacer otra vez. Abren la puerta a la estatización de 25.000 millones de dólares. El BCRA, según la Comunicación A7918, ofrece Notas en dólares estadounidenses con opción de rescate para los importadores. En un contexto donde parte importante de la deuda es deuda intrafirma, es decir dentro del mismo conglomerado empresario, y donde buena parte de ellos acumularon divisas en el exterior vía endeudamiento, valoración y fuga, los mismos de siempre amenazan con una nueva estatización”, enfatizó el economista y ex director del Banco Nación.
Según el último informe sobre deuda externa privada difundido por el BCRA (con datos cerrados al 30 de junio de 2023), la industria manufacturera registraba un stock de deuda por 28.142 millones de dólares, de los cuales 15.842 millones corresponden a un flujo financiero intra empresas. Sociedades privadas financiándose a sí mismo.
En el caso de la industria minera, esa interrelación llega al 75%. Sobre este sector suenan todas las alarmas relacionadas al encuentro oficial entre Milei, Caputo, Bausili y los funcionarios norteamericanos del Consejo de Seguridad. En especial por la presencia de Mike Pyle: aparece en el radar la producción de litio.
Las dos empresas que operan en Argentina, Livent y Allkem, pertenecen a fondos buitres y bancos internacionales, entre ellos Blackrock, HSBC, Vanguard y JP Morgan. Todos viejos conocidos de la dupla Caputo – Bausili.
Ahora, el BCRA se hará cargo de conseguirles los dólares que puedan requerir para cubrir los pasivos comerciales. Luego, vendría el nuevo proceso de endeudamiento con la mira puesta en los recursos naturales.
Fuente: Sebastián Premici – El Destape –