El Equilibro en la Vejez.

El equilibrio es una capacidad física fundamental que tiende a deteriorarse con la edad, afectando directamente la movilidad, la independencia y la seguridad de las personas mayores.

El equilibrio deficiente es una de las principales causas de caídas en adultos mayores, las cuales representan un riesgo grave de fracturas, hospitalizaciones y pérdida de autonomía.

Se destaca que fortalecer el equilibrio no solo reduce el riesgo de caídas, sino que también mejora la postura, la estabilidad al caminar y la coordinación general, lo cual se traduce en mayor confianza para realizar actividades diarias.

En el artículo destacado nos ofrece consejos claros y precisos de lo que debemos hacer y sobre todo, como comenzar.

Estos ejercicios, realizados de forma progresiva y constante, permiten activar los músculos estabilizadores del cuerpo, especialmente los del tronco, caderas y piernas.

El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento recomienda incluir ejercicios de equilibrio dentro de un programa que también contemple entrenamiento de fuerza, resistencia y flexibilidad.

Incorporar ejercicios de equilibrio en la rutina diaria de los adultos mayores es una estrategia clave para prevenir caídas, mantener la movilidad y conservar la calidad de vida.

Las recomendaciones  son un llamado a actuar de forma preventiva y consciente, promoviendo el bienestar físico y emocional a lo largo del proceso de envejecimiento.

El equilibrio no solo es una habilidad física: es también una herramienta esencial para vivir con dignidad y autonomía en la tercera edad.