Internación del Presidente; Papelón informativo
La enfermedad de un Presidente es un secreto imposible de ocultar. Es una verdad que Mauricio Macri conoce de memoria.
La Secretaría de Comunicaciones informó oficialmente pasadas las 21 que «el Presidente tuvo esta tarde, alrededor de las 15, una leve arritmia que no le impidió continuar con su trabajo y mantener la agenda de actividades previstas en la Quinta de Olivos». Y que siendo ya las 19.30 horas aproximadamente, la Unidad Médica Presidencial decidió que se realizara una revisión, internarlo en la Clínica Olivos y pasó el diagnóstico: «fibrilación auricular cardíaca». La información trascendió y fue publicada por el portal de «Caras» a las 18 horas que dijo que el Presidente estaba internado en ese mismo momento.
La primera respuesta fue taxativa: «es mentira». En efecto, Macri estaba con los periodistas Eduardo Feimann, Gloria López Lecube, Walter Curia y Edi Zunino. El vocero Iván Pavlovsky sacó la foto del encuentro.
Luego se confirmó que el Presidente, una vez concluido el off con los periodistas, fue directo a la Clínica; era cierto el alerta, perfectamente chequeado, Macri estaba internado.
Desde que apareció la primera noticia sobre la salud del Presidente hasta que volvió a la Residencia de Olivos pasaron menos de seis horas en este 3 de junio.
Todo esto sucedió en un lapso corto de tiempo, pero la información sobre la salud del Presidente es vital, y cómo la comunican también, hubiese alcanzado con que Macri suspendiese su agenda apenas se sintió mal y se informe a la población inmediatamente.
Evitemos estos papelones que sólo hacen que muchas veces una pavada pase a ser una tremenda especulación.