Luca Pratti, Sobre Seguridad en Comunas un Desafío.

Comunas un Desafío entrevistó a un vecino de la zona, Luca Pratti, que se desempeño hasta diciembre de 2015 como Coordinador de Fiscalización en el Ministerio de Seguridad de la Nación y actualmente esta ocupando el cargo de Sub-Secretario de Planificación y Gestión de Seguridad Ciudadana en Río Gallegos, Provincia de Santa Cruz.

Nuestra intención era conocer un poco más del tema con alguien que estuvo en la gestión directa y en el trato con las 54 comisarías de la Ciudad.

A continuación transcribimos algunos pasajes de la charla con Luca al que desde ya le agradecemos su tiempo y su predisposición estando de vacaciones en Buenos Aires.

Comenzó:»En realidad la finalidad que tuvo el Ministerio de Seguridad que se creó hasta el 10 de diciembre de 2015 claramente fue llevar adelante un proceso de democratización de las fuerzas de seguridad y una conducción política desde un plano mucho más amplio de lo que vemos hoy en la Ciudad de Buenos Aires. En qué sentido? entender que la fuerza de seguridad tienen que ser la pieza de ejecución de aquellas necesidades que plantea la conducción política en cuanto a la criminalidad que hay en el país.

Nosotros veníamos acostumbrados a una fuerza de seguridad que se auto gobernaban y se auto administraban de acuerdo a sus necesidades y a sus criterios y esta claramente expuesto a la luz de la realidad y de los años que pasó en la fuerza que un policía cuando entra en una escuela no entra con el espíritu de saber auto administrarse y auto gobernarse y menos sale con el espíritu de llevar adelante ideas de planificación y planeamiento, entonces lo que trata de hacer el Ministerio de Seguridad es planificar de manera mucho más ordenada esos objetivos o esas metas en materia de seguridad pública y en materia de seguridad ciudadana; acá claramente fue el foco más importante donde el gobierno nacional tenía una intervención inclusiva en la Ciudad de Buenos Aires, con las 53 comisarías primero y la número 54 que se abrió a finales del 2015. Fue llevar adelante una intervención territorial con una diagramación operativa y a su vez un despliegue logístico que de los años que tiene una fuerza centenaria como la Policía Federal fue la más grande de los últimos 50 años.

Estamos hablando que se entregó una fuerza que en el año 2003 tenía 38.000 efectivos aproximadamente, se los llevó a 45.000 y en los términos de la Ciudad de Buenos Aires se han puesto en valor las 54 comisarías, se han adquirido más de 700 patrulleros, cosa que nunca se dió en la historia, donde todos los años se renovaba el parque automotor de las dependencias, a su vez se creó un sistema automático para que los comisarios tengan la posibilidad de atender las necesidades propias del personal policial y de las dependencias sin burocracia. Se han llevado adelante una coordinación en muchísimos temas que hoy en día lo que vemos es que se han desarticulado.

En materia de Seguridad , había una política activa de Participación Ciudadana que hoy en día con los Foros de Seguridad Ciudadana no se ve explicitado porque la política de participación ciudadana nuestra era la intervención territorial, era ver lo que necesitaba el vecino, que estaba pasando en el barrio, los recursos que tenía la institución policial, desde el representante del Ministerio de Seguridad, con el comisario o la fuerza de seguridad que está en el territorio, que tengan una interacción permanente entonces de esta forma llegabas a una combinación, anticipándose a los problemas que tenían los vecinos complementariamente ayudando a la comisaría de esa zona; no era un modelo perfecto, no era mágico, faltaba trabajar mucho, de ahí se desprende el trabajo que se hizo con el plan de seguridad urbana, estaba focalizado en eso, en saber cuales eran desde un punto de vista la inteligencia criminal, las demandas puntuales que arrojaba el mapa del delito con las necesidades o demandas vecinales que tenía la ciudadanía en el barrio o en la jurisdicción y a partir de eso se concretaban lo que eran los planes  locales de seguridad,  en un conjunto entre los vecinos y las autoridades del Ministerio .

Con la policía nosotros siempre cambiamos el eje de atención a partir del 2012 , entendiendo que la herramienta que le tiene que brindar el Ministerio de Seguridad es no solo el de conducción y coordinación sino también el de apoyo y acompañamiento. En este sentido lo que paso el otro día en la comisaría 38 (Flores) es claramente un ejemplo del no acompañamiento y no apoyo que estaba, antes siempre estaban autoridades políticas del Ministerio frente a cada una de las manifestaciones, esto es algo que se veía previamente, de un día para otro el malestar de la gente no se ve reflejado en una marcha de protesta, nosotros nos enterábamos con los operadores territoriales de participación ciudadana con tiempo, nos anticipábamos a los problemas, juntándonos con los vecinos y después se concretaban la marchas porque es un derecho que tiene el ciudadano de poder manifestar y expresar un descontento.

No estoy de acuerdo con los incidentes o los desmanes que se provocaron dentro de la comisaría  que no deja de ser un edificio público y pertenece a todos.

Nosotros hemos tenido marchas, hemos tenido protestas en las dependencias policiales pero siempre fueron pacíficas, donde la gente se manifestó y fue atendida, escuchada, y se le dió una respuesta. Las soluciones son mágicas: NO, las soluciones no son mágicas lo que yo creo es que  la gente necesita también escuchar una responsabilidad, que los vecinos vayan a juntarse al despacho del Ministro de Seguridad eso era algo que nosotros en los últimos años no estábamos acostumbrados , ya que en tanto la Ministra como el Secretario de Seguridad iban al lugar, inter actuaban con los vecinos, y todo el equipo que trabajaba en el Ministerio de Seguridad estaba claramente en atención a lo que pasaba.

En materia de relación entre el Ministerio de Seguridad de la Nación en su momento y el traspaso con el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, lo que se vió fue un falta de coordinación y planificación. Por primera vez se alinean los gobiernos nacionales, de la provincia y de la ciudad y estamos en una circunstancia donde se planteó el traspaso de la policía desde hace un año atrás y recién hoy están creando una policía nueva, después de una ley votada en la Legislatura, y se les han recortado los recursos logísticos y operativos a cada una de las comisarías, el personal policial no tiene una certeza y una respuesta en cuanto a su  condición de tal, ya que antes eran suboficiales u oficiales de una fuerza, con un escalafón, con un grado, con una trayectoria, con una jerarquía  y ahora es una policía totalmente nueva que plantea una escalafón único, pero disfrazado, porque tiene diferentes instancias donde está el personal de calle, el personal de conducción, el personal superior, algo que es nuevo, y si bien estoy de acuerdo con la ley que se votó en la Ciudad de Buenos Aires porque creo que es una ley progresista, pero toda ley tiene que ser sujeta a una implementación que sea de la realidad y es algo que a la luz de los hechos que están sucediendo no creo que exista ese acompañamiento para la fuerza».