Noche Buena y Año Nuevo Mas Caros.
Si comparamos los precios de diciembre 2018 respecto de diciembre 2017, festejar nochebuena o fin de año con un típico asado, con picada y helado de postre les cuesta a los hogares 48 por ciento más caro que en 2017, para una mesa de 5 a 6 comensales.
La típica mesa dulce de fin de año experimentó durante 2018 un importante incremento de precios.
En 2018 un champagne, una sidra, 2 pan dulces, 1 budín y frutas secas tienen un costo aproximado de 943 pesos mientras que en 2017 sumaban 530 pesos, en 2016 alcanzaban los 398 pesos y en 2015, 298 pesos. La mesa dulce de las fiestas se encareció 78 por ciento en el último año y 216 por ciento en los últimos tres.
Los productos que mayor incremento sufrieron durante el último año fueron el pan dulce (un aumento de 140%) y el mix de frutas secas (100% más caro).
El Programa Precios Cuidados ofreció, en 2014 y 2015, una canasta navideña de seis productos: sidra, turrones, pan dulce, garrapiñada, maní con chocolate, budín con chocolate. Esa canasta costaba en 2015 entre 54 y 59 pesos según la región.
Aunque este año se promocionó la inclusión de un combo navideño, finalmente no se ofreció dentro del programa. Así entonces, las familias solo pueden acceder a las cajas navideñas que ofrecen los supermercados a un precio muy superior. La canasta más barata es la ofrecida en supermercado Coto, que incluye seis productos y el precio de comercialización es de 200 pesos. Si se la compara con una canasta similar de 2017 (aunque con un producto menos, el budín), el incremento de precios fue de 68 por ciento, ya que la canasta de Plaza VEA tenía un costo de 119 pesos.
En diciembre de 2018 una familia debe disponer de un total de 4.156 pesos para poder costear una cena navideña compuesta por una picada, un asado para 5-6 personas, helado y una mesa dulce. Considerando las dos fiestas de navidad y año nuevo, el total que debe disponer es de 8.312 pesos.
Los alimentos que se consumen en una cena de fin de año y en la mesa dulce aumentaron en promedio 54 por ciento en el último año, mientras que el SMVM (Sueldo Mínimo Vital y Móvil) solo lo hizo 28 por ciento, al igual que la jubilación mínima. Si se considera la evolución desde 2015, el incremento alcanzo el 243 por ciento entre las fiestas de 2015 y las actuales, pero el SMVM sólo creció 102 por ciento y la jubilación mínima, 116 por ciento en igual periodo.
Si se considera el Salario Mínimo Vital y Móvil, se pueden adquirir 2,7 cenas y mesas dulces en 2018, mientras que en 2017 se podían comprar 3,3 cenas y mesas dulces, es decir, una pérdida de poder adquisitivo de 17 por ciento. Si se consideran los precios de 2015, la perdida asciende a 41 por ciento, dado que en aquellas fiestas podían adquirirse 4,6 cenas y mesas dulces.
Si la comparación se realiza con la evolución de la jubilación mínima, se observa que en 2018 se pueden adquirir 2,2 cenas y mesas dulces, mientras que un año antes se podían comprar 2,7 y en 2015, 3,5. Es decir, se produce una pérdida de poder adquisitivo del 16 por ciento en el último año y de 37 por ciento respecto de diciembre de 2015.
Fuente: CEPA (Centro de Economía Política Argentina), Gracias Hernán.