Oscar Fernández, Actor, nos Visitó en Comunas.
Aprovechando la visita en nuestros estudios de Oscar Fernández, actor, integrante del Grupo Tambo Teatro, creado en el año 2007 en el marco del taller de producción teatral del Centro Cultural Chacra de los Remedios del Parque Avellaneda, iniciamos el programa hablando de la obra que están presentando «1789» año de la Revolución Francesa.
La historia se sitúa sobre principios de ese año y finaliza en 1791 cuando se pasa, lo dice también la obra, del dominio noble al dominio de ricos, fue una revolución que tuvo su parte inconclusa; pareciéndonos novedoso la interactuación con el público sentado en filas, y los actores rondándolos, y nos pareció muy buena una parte de la obra en la cual se acerca un actor a un grupo de tres o cuatro personas y les va relatando la historia y eso lo replican con todos los grupos de asistentes.
Oscar nos dice, «para nosotros esa es la escena preferida y la escena clave de la obra, es el centro de la historia; porque nosotros empezamos contando la hambruna y contando la miseria del pueblo, a lo que estaba sometido a través de escenas y después eso en el centro de la obra te relata como fue aconteciendo hasta llegar a la Toma de la Bastilla.
Nosotros tenemos distintos momentos, hay momentos muy intimistas, hay momentos de mucha concentración en algo trágico, en algo sufrido, después explota en la festividad de la Toma de la Bastilla y después viene la traición, después el aprovechamiento del movimiento popular para transferir el poder de un sector a otro.»
Nos informa, «además de ser una puesta que tiene que ver con la original tiene mucho que ver con nosotros con el Grupo Tambo, es decir, la autora del guión Ariane Svetlana Mnouchkine, digamos fue la creadora también del Teatro del Sol, en francés Théatre de Soleil, que era un grupo como nosotros, funcionando en la Cartoucherie, y fue la puestista de la obra en un galpón como el nuestro, más grande, era una antigua fábrica de armas, nosotros sentamos al público, ella entraban parados por eso nosotros arrancamos ese escena con acérquense, escuchen, porque en la puesta original cada actor juntaba a una cantidad de público a su alrededor y les contaba todo lo que había pasado.»
«Hay muchos puntos en común entre el trabajo que nosotros hacemos y venimos haciendo desde hace diez años en el Grupo Tambo; también nuestra permanencia y nuestro trabajo es una forma de defensa de ese espacio, es una forma de defensa del espacio público, como decía Gregorio hay una Mesa de Consenso, hay un Gobierno Tripartito, porque ese fue un lugar que estuvo abandonado, un lugar hermoso que estuvo abandonado y los vecinos lo han recuperado; entonces hoy existe una mesa de consenso donde estamos los actores culturales; ahí se realizan diferentes actividades, todas la semanas hay actividades en un escenario al exterior, nosotros como teatro de sala, hay murga, hay teatro callejero, y se ha recuperado también la Casona, que es una belleza, que funciona como museo y como muestra de artes plásticas que también se hacen ahí» acotó.
Y acerca del lugar, del Parque Avellaneda, recordó,»el natatorio fue el primero de la Ciudad de Buenos Aires, el primero cerrado y hoy funciona como escuela; entonces es un espacio además de la belleza paisajistica natural es un espacio multicultural; se recuperó el trencito, entre otras cosas. No solo estoy comprometido con la obra sino con el «todo», es que necesariamente tiene que ser así y comprometido también con el mensaje que transmite la obra, con los mensajes de las obras que nosotros elegimos, no es solo el mensaje histórico, sino que tiene que ver con la actualidad. No hay manera de estar mirando la obra y despegarse de la actualidad, de la realidad, en cualquier ámbito.»
Y continuó reseñando «su» obra: «Utilizado por otros sectores de poder para actuar en su favor, el pueblo es el que pone el cuerpo, el que pone la sangre, y son otros los que terminan beneficiados, entonces esto lo podemos ver todo el tiempo, y nuestro grupo esta comprometido con esas ideas, con con esos mensajes, con esas obras suelen elegirse de esa manera. Uno de los chicos implementó un mensaje al final cuando nosotros hacemos el pedido a «la gorra», porque nosotros todo lo que hacemos es absolutamente a pulmón, artesanal, nosotros estamos divididos en grupos, (el grupo de utilería, el grupo de escenografía, el grupo de prensa y difusión, maquillaje, vestuario), todo lo que hace que esto funcione pero además todos colaboramos en todas las áreas que podamos cuando podamos, es un trabajo en común todo el tiempo, es un esfuerzo de todos; solamente con la gorra es donde nosotros sacamos los recursos para continuar en el espacio, continuar ofreciendo al público arte y con nuestra satisfacción de poder hacer esa tarea. Quería terminar con la frase que decía nuestro compañero al final: » Nosotros creemos que el teatro no es sólo un instrumento para mostrar una realidad sino un martillo para modificarla»; es decir activar sobre las conciencias, activar sobre la emoción, y el pensamiento de las personas para reaccionar, nosotros nos vamos turnando en el pedido de la gorra y a partir de ahora esta frase quedó instalada.»
«Le pedimos al público que en nuestra página de facebook que es @Tambo Teatro, exprese su opinión, también en Alternativa Teatral que es el otro medio en internet donde nosotros salimos publicados, realmente el público sale primero sorprendido por la forma porque mucho tiene que ver como puestista Daniel Begino, que es nuestro director, y apela mucho a estas formas de participación con el público; la obra anterior «El Alma Buena» de Szechwan la gente también se sentía involucrada en todo lo que pasaba; en esta obra (1789) nosotros hacemos por ejemplo la sesión de los diputados donde se instala la Declaración de los Derechos del Hombre en la Constitución y esa sesión de diputados es muy intensa, refleja lo que es una verdadera discusión, con la tensión de lo que está sucediendo en la urgencia de lo que está pasando y el público puede sentir eso, esa urgencia y esa necesidad y el público sale sorprendido y después recomendándonos por supuesto y agradecidos por el trabajo que hemos realizado» se entusiasma al relatarlo.
Agrega además, «hay mucho teatro independiente que ha ido creciendo exponencialmente, mucha gente que le gusta dedicarse al teatro porque ve una posibilidad ahí de desarrollar una actividad que puede llegar a ser lúdica pero también te desarrolla como persona y te hace desarrollar partes intelectuales. Nuestro grupo es abierto totalmente al público, aparte de hacer las funciones a la gorra totalmente gratuitas, nosotros damos ingreso al vecino que no necesita tener conocimientos previos teatrales, en este momento ovbiamente ya tenemos en marcha la obra, el que se quiere sumar y dice bueno yo quiero repartir volantes se acerca, nuestro espacio es ahí en el Tambo del Parque Avellaneda y nuestro horario es siempre los viernes a la noche, cuando tenemos ensayo arrancamos a las 19 horas, ahora que estamos haciendo función llegamos más temprano porque tenemos que convertir el espacio, armar todo.
Se llega por la continuación de la calle Bilbao, viniendo por Lacarra es el primer semáforo doblando a la derecha, habría que iluminar un poco la zona, y paradójicamente de ahí salen los camiones que arreglan las luminarias de la Ciudad, justo enfrente, y nosotros no tenemos mucha luz.»
Personaliza su realto, «en mi caso personal yo el año pasado en diciembre tuve que ser operado, me hicieron cuatro by pass, nosotros el año pasado habíamos empezado con la obra a trabajar en la lectura, había que estudiar el texto, y mi motor para no pensar en eso y seguir adelante y decir tengo que estar bien y tengo que superar este escollo y estar bien para el año que viene era el Grupo Teatro, era la obra 1789, es decir, yo estaba esperando los turnos, yo estaba a la noche esperando que al siguiente día me operaba y yo estaba estudiando el texto de la obra; es un motor impresionante para el alma. Nosotros tenemos la señora que hace la aldeana que recibe la moneda del Rey Luis, que es una señora de más de ochenta años, y hemos trabajado en el «Alma Buena» de Szechwan con una nena de nueve años, o sea que no hay edad, es para que todo el mundo se pueda acercar.»
Aprovecha para pasar el aviso, «este año vamos a realizar esta obra hasta fin de Noviembre todos los viernes a las 20 horas en este lugar (comenzamos en agosto) pero el año que viene seguramente estaremos recorriendo otros barrios, otros centros culturales; nosotros hemos actuado ya en Flores, en la Casa Marcó del Pont, en el Resurgimiento que está en Artigas y Jonte, estuvimos en La Boca, en el Espacio Cultural Julián Centeya, empezamos a recorrer todos los centros culturales; así como en nuestro centro cultural hay otros grupos y otras actividades que también vienen.»
Finaliza con su historia: «Yo empecé hace casi diez años, hace siete que estoy en el Grupo Tambo, empecé en un taller que realizan en las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Versailles, en la escuela EEUU de la calle Bruselas. Yo soy ingeniero, pero mi vida laboral hoy es de docente de escuela técnica, y en formación profesional a la noche, funcionamos en el 405 que está en Ciudadela, en Fuerte Apache.»
Como docente opina, «Con respecto a la nueva escuela que quieren implementar lo que falta es información, asi que me cuesta tomar posicionamiento, porque en el aire «piolines sueltos» uno puede decir prácticas laborales esta bueno ahora ¿cómo se van a encarar? esto es lo que falta saber.»