La Educación y la Salud Siguen Protestando en la Ciudad de Buenos Aires.

La protesta de estudiantes secundarios de la Ciudad de Buenos Aires se mantenía este jueves 29 de septiembre y se llegó a 25 establecimientos.

Hoy son al menos 13 colegios tomados y otras 7 con pernocte, en reclamo de viandas de calidad nutricional, mejor infraestructura edilicia y en contra de las prácticas laborales en empresas.

El «Lengüitas», la Escuela Superior Especializada en Cerámica N° 1, la escuela Federico García Lorca, el colegio Mariano Moreno, la Escuela Superior de Educación Artística en Artes Visuales Rogelio Yrurtia, la Escuela de Música Juan Pedro Esnaola, la Rodolfo Walsh, la Nicolás Avellaneda, el Liceo 5 Pascual Guaglianone, el Osvaldo Pugliese, la Escuela de Educación Media N°7 «María Claudia Falcone» y la Escuela de Teatro Niní Marshall, se encontraban tomadas por sus estudiantes, según el último listado difundido por la Coordinadora de Estudiantes de Base (CEB).

También continuaba tomada la escuela de Comercio Carlos Pellegrini, institución que no depende de la Ciudad de Buenos Aires sino de la Universidad de Buenos Aires (UBA), en solidaridad con el reclamo del resto de las escuelas por «viandas de calidad, en cantidad y para se les dé una mesa de diálogo a les estudiantes perjudicades por el ACAP (Actividades de aproximación al mundo del trabajo y a los estudios superiores)», mientras que estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires realizaron el miércoles por la noche un «pernocte».

Estas últimas semanas se custionó al ACAP por viralizarse situaciones de alumnos/as obligados/as a conseguirse zapatos especificos de taco, negros, cerrados (chicas en el Hotel Hyatt), acomodar ropa blanca en hoteles, lavar platos, servir café y hacer sándwiches, que no tiene nada de malo si es una elección personal.

Las familias de los alumnos que «están poniendo el cuerpo» comenzaron a organizarse a través de diferentes organismos sociales y especializados en derecho, para responder judicialmente a las denuncias penales y contravencionales que la Policía porteña les envía a sus domicilios a través de la Policía de la Ciudad.

La APDH, el CELS, y la CORREPI son algunos de los organismos de derechos humanos que se pronunciaron contra los “aprietes del gobierno porteño” y ofrecieron sus servicios para asesoras a las familias atacadas por la administración de Rodríguez Larreta.

El protocolo (Resolución 643/MEGC/18 del 14 de febrero de 2018)  que el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, liderado por Soledad Acuña, aplica cuando los estudiantes toman un colegio ordena a las autoridades de cada establecimiento, entre otras acciones, identificar a las familias que no retiran a sus hijos de la protesta y fotografiar los daños que producen al «patrimonio escolar», para luego «elevar» esa información a la Procuración General.

El texto no habilita en ningún momento a la intervención de la Policía de la Ciudad aunque a partir del martes 27 esa fuerza porteña concurrió a los domicilios de los alumnos que participaban en las tomas para notificar a sus familias.

De acuerdo al protocolo, al comenzar la protesta, las autoridades de la escuela deben dar intervención al Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y al Servicio de Asistencia Médica de Emergencia (SAME).

Hoy la mayoría de las autoridades de los establecimientos están apoyando los reclamos de sus alumnos.

Definitivamente la balanza se inclinó hacia los que protestan cuando la ministra Acuña atacó y amenazó a toda la comunidad educativa con vergonzosas declaraciones en todos los medios que responden al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta.

Varios organismos, como la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, se han propuesto como articuladores y convocantes del diálogo que hoy la ministra Acuña y Rodríguez Larreta no tienen intención de iniciar.

Horacio Rodríguez Larreta, quiere que las madres y padres de los estudiantes que hicieron tomas en el colegio Mariano Acosta paguen el «costo laboral de salarios del personal docente» durante la vigencia de la medida de protesta, equivalente a 1,5 millón diario de pesos. La ministra de Educación, Soledad Acuña, adelantó que la medida se hará extensiva a los otros colegios tomados.

Los docentes porteños están anunciando ahora:

La misma situación, aunque con otros argumentos, está produciendo paros de las Organizaciones sindicales del ámbito de la salud, en los hospitales de la Ciudad, en rechazo de la propuesta paritaria de la administración del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, y piden por una «recomposición y aumento salarial».

Los paros de 24 horas se produjeron el martes 20 y el 27 de septiembre.

Un trabajador del escalafón general está cobrando de 60 a 70 mil pesos, (por debajo de la línea de pobreza).

ATE sigue reclamando por la inclusión a la carrera profesional prevista en la ley 6.035 para los trabajadores de enfermería.

En tanto, los enfermeros profesionales de la Ciudad, agrupados en la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE), persisten en el reclamo para ser reconocidos como profesionales de la salud.

La Federación de Profesionales de GCABA exige un «aumento salarial al equipo de salud» y «blanqueo de sumas no remunerativas».

Las protestas en hospitales públicos porteños abarcarán también a residentes y concurrentes que se movilizan en demanda de un aumento salarial del 100%.

No es casual que dos de los sectores que mas han sufrido la desinvesión de la gestión del PRO en todos los años de su gobierno (2007-2022) estén protestando en las calles y en los establecimientos educativos.

La Salud y la Educación según el marketing «Larretista» no representan votos en el territorio porteño aunque no siempre será asi. El sector privado de ambos sectores reúne a la gran cantidad de votantes del oficialismo de la CABA.