Un Femicidio Cada 32 Horas.
En lo que llevamos de 2018 se cometió un femicidio cada 32 horas, un promedio levemente inferior al promedio de la última década y al del último año, que registró uno cada 20 horas.
Entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2018, de acuerdo con la ONG «La Casa del Encuentro», en los medios argentinos se dio cuenta de 225 femicidios y femicidios vinculados a mujeres y niñas (aquellas asesinadas por estar en la línea de fuego o para torturar psíquicamente a la mujer) y 29 femicidios vinculados de hombres y niños.
Por esos femicidios, 250 chicas y chicos –el 67 por ciento de ellos menores de edad– quedaron sin madre.
En más del 60 por ciento de los casos, el victimario fue una pareja o una ex pareja, mientras que en 21 casos no hay registro de quién fue el agresor porque no hubo personas detenidas.
El informe dio cuenta, además, 4 casos de mujeres muertas en abortos clandestinos y 4 travesticidios. La mayoría de las víctimas (más del 60 por ciento) tenía entre 19 y 50 años; más de 15 por ciento era menor de 18, y 22 por ciento era mayor de 51.
Una de cada cuatro mujeres fue asesinada con armas de fuego. Hay mujeres baleadas (57), apuñaladas (53), golpeadas (39), estranguladas (19), incineradas (12), asfixiadas (8), degolladas (5), ahorcadas (6), descuartizadas (1).
Hay 73 casos registrados en la provincia de Buenos Aires; 23 en Córdoba, y 21 en Santa Fe.
En relación a las tasas de femicidios (casos cada 100 habitantes) quedó en primer lugar Tucumán (1,10), seguida de Neuquén (1,09). Jujuy, que en los últimos 10 años había liderado el ránking, quedó en el octavo puesto con una tasa de 0,74.
El 87 por ciento de las mujeres asesinadas no habían hecho la denuncia.
En 13 casos el agresor tenía orden de exclusión del hogar.
El Estado no está suficientemente capacitado para actuar y sigue existiendo la «comisaría hostil» que es lenta al actuar «casi apañando» al agresor.