Día Internacional Contra el Fracking.
La técnica del fracking consiste en fracturar al interior de la tierra distintas rocas que tienen petróleo/ gas en su interior.
Lo que muchos probablemente no saben es que dicha actividad resulta altamente nociva para la salud de los seres humanos, la tierra y el agua, según expertos.
El fracking para extraer petróleo y gas representa una amenaza directa e inmediata para nuestra agua potable, aire, salud y comunidades.
Además, puede provocar sismos y terremotos. La industria del petróleo y el gas ha intensificado su masiva campaña multimillonaria de relaciones públicas para convencer a los gobiernos y funcionarios electos de que su gas y petróleo sucios son limpios. Pero se sabe muy bien que lo que venden estos lobbies es una burda mentira.
Es importante aunar la enorme cantidad de actividades y movilizaciones contra el fracking en todo el mundo.
Cientos de organizaciones locales están trabajando para proteger a sus comunidades del fracking. En todo el mundo, las comunidades locales se manifiestan en contra de la fractura hidráulica.
La industria del fracking intenta dividir a la población, mediante campañas desinformativas. Por lo que un día de acción global coordinado permite que el rechazo a esta actividad sea más eficaz y ayuda a maximizar la atención de los medios en un momento crítico y a destacar las nefastas consecuencias de este método extractivo.
En todo el planeta se desarrollan debates en torno a la fractura hidráulica. El gas no convencional se promueve como una solución para un futuro bajo en carbono. Y es fundamental que las personas entiendan que el fracking no es la respuesta. Es una técnica peligrosa en sí misma, que no puede regularse con seguridad y que debería prohibirse.
El mensaje este Día Mundial contra el Fracking 2022 debe ser alto y claro. La fractura hidráulica es intrínsecamente peligrosa y no debería ser parte de nuestro futuro energético. Por lo que la solución lógica es prohibir terminantemente su implantación en todas partes del mundo. Por el bien común de la humanidad y del ecosistema llamado Tierra.
Los movimientos para prohibir el fracking ya han logrado algunos resultados muy importantes.
Solo en 2021 se llevaron a cabo más de 200 acciones locales en los Estados Unidos en contra del fracking. También se logró su prohibición en Francia y Bulgaria. Y hay moratorias en varias regiones de Europa que aún están por resolverse.
En Sudáfrica se logró detener la legislación que quería expandir el fracking y el estado de Vermont prohibió este sistema por completo.