Bartolinitis.

Publicado: 11 ago 2023
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Las glándulas de bartolino se encuentran a los costados de la abertura vaginal. Estas glándulas secretan un líquido que ayuda a lubricar la vagina.

A veces, las aberturas de estas glándulas se obstruyen en la entrada de la vagina lo que hace que el líquido vuelva a la glándula. El resultado es una inflamación llamada quiste de bartolino o bartolinitis.

Al obstruirse el pequeño orificio por donde sale el líquido secretado por la glándula comienza a formarse un bulto redondo en el borde de la vagina. El quiste puede tener un tamaño variable.

Las causas principales de la bartolinitis, son las siguientes:
 
•Acumulación de líquidos: Sobre todo cuando hay alguna infección o proliferación de la piel que puede causar que la abertura de la glándula de bartolino se obstruya.
•Las bacterias: Pueden llegar a ocasionar la infección de algún quiste y facilitan la acumulación de pus en la región. Algunas de éstas provocan infecciones de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia.

Lo normal es que los quistes de bartolino no muestren sintomatología. Si el quiste tiene un tamaño reducido la persona que lo posee apenas lo nota. Un quiste de bartolino se puede infectar completamente en cuestión de días.
 
Si el quiste se infecta, es posible que notes los siguientes síntomas:

•Un bulto cerca de la abertura vaginal que es doloroso, incluso a la palpación.
•Molestias al caminar o al sentarte.
•Dolor durante las relaciones sexuales.
•Fiebre.

Un quiste de bartolino generalmente no requiere ningún tratamiento, sobre todo si no causa ningún signo ni síntoma. Cuando sea necesario, el tratamiento dependerá del tamaño del quiste, del nivel de malestar y si está infectado, lo que puede provocar un absceso.

Las opciones de tratamiento que el médico puede recomendarte son:

•Baños de asiento: Remojarse con agua tibia (baño de asiento) varias veces al día.
Drenaje quirúrgico: Es posible que se deba recurrir a una cirugía para drenar un quiste que está infectado o que su tamaño es anormal.
Antibióticos: El médico puede recetarte un antibiótico si el quiste está infectado o si los análisis demuestran que tienes una infección de transmisión sexual.