Semana Mundial del Agua.

Publicado: 23 ago 2022
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El agua dulce del mundo pasará a ser un bien escaso debido al aumento de las temperaturas el derroche de muchos sectores poblacionales y el consumo desmedido.

Para abordar esta crisis mundial del agua y el caos climático la Semana Mundial del Agua 2022, que se celebrará en Estocolmo de este 23 de agosto al 1 de septiembre, se centrará en el valor del agua.

La Semana Mundial del Agua 2022 tiene como objetivo «destacar el agua más olvidada del mundo».

Este año la misión es dar visibilidad al agua que está escondida en los acuíferos subterráneos o en la atmósfera.

La Semana Mundial del Agua se celebra del 23 de agosto al 1 de septiembre en el corazón de Estocolmo en el Stockholm City Conference Centre, donde se celebró la Semana Mundial del Agua en los años anteriores. Se abordará el tema «Ver lo invisible: el valor del agua».

Esta Semana Mundial del Agua es un punto estratégico para los problemas del agua en todo el mundo. Con ella se pretende reflexionar sobre los problemas de la falta de agua en el mundo.

En este foro se reúnen expertos de todo el mundo para analizar y poner soluciones a los desafíos hídricos más acuciantes del planeta.

 

Imaginate que vas a la canilla y no sale ni una gota de agua, no podrías beber, lavarte, lavar los alimentos, curar una herida con seguridad. Imagina una cocina sin agua, un hospital sin agua.

En muchos países del mundo, en los hospitales no disponen de agua corriente y limpia, lo que genera graves problemas, infecciones y muchas muertes relacionadas con esta falta de higiene.

Además el agua o la falta de ésta tiene gran impacto en muchos otros aspectos de la Humanidad: la producción de alimentos, de energía, el cambio climático, la educación y la salud.

Podríamos decir que es el elemento básico sin el cual no está garantizada la vida. Y sin embargo es un recurso escaso en algunas zonas del mundo, con datos alarmantes. Se estima que 4 de cada 10 habitantes del planeta están afectados por escasez de agua.

Según UNICEF y la Organización Mundial de la Salud:

  • 2,1 billones de personas carecen de acceso a servicios de agua potable gestionados de manera segura.
  • 4,5 billones de personas carecen de servicios de saneamiento seguros.
  • 340.000 niños menores de cinco años mueren cada año por enfermedades diarreicas.
  • Al menos 1.800 millones de personas en todo el mundo beben agua que no está protegida contra la contaminación de las heces.

En julio de 2010, la Asamblea General de la ONU reconoció el derecho de todas las personas al agua y al saneamiento. Ello implica que cada persona debería tener acceso a una cantidad suficiente de agua para uso doméstico: entre 50 y 100 litros de agua al día.

Y además que sea segura, aceptable y asequible. Su coste no debe suponer más del 3% de los ingresos del hogar. Y la fuente no debe estar más lejos de 1 Km del hogar ni su recogida superar los 30 minutos.

Las Naciones Unidas llevan mucho tiempo trabajando en el problema del agua en el mundo, y podemos señalar una cronología de acuerdos y reuniones que han supuesto mejorar en gran medida la crisis mundial del agua. Estas cumbres y reuniones se han centrado en el problema del agua:

 

  • Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua (1977).
  • Decenio Internacional del Agua Potable y del Saneamiento Ambiental (1981-1990).
  • Conferencia internacional sobre el agua y el medio ambiente (1992).
  • Cumbre para la Tierra (1992).
  • Decenio Internacional de Acción «Agua para la Vida» 2005-2015.
  • Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
  • Marco de Sendái para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030.
  • Agenda de Acción de Addis Abeba 2015 sobre la Financiación para el Desarrollo.
  • Acuerdo de París 2015.