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Subte Porteño…el Mismo Cuento de Siempre.
Publicado: 04 feb 2020
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Keolis que se presentó como una sociedad entre la operadora del Metro de Lyon, la Corporación América, del empresario Eduardo Eurnekián y una firma constituida por la Société Nationale des Chemins de fer français y un fondo de pensiones de Québec, con presencia en 16 países y líder mundial en soluciones de movilidad se retiró de la licitación por el Subte Porteño.
Desistió, mediante un comunicado, de continuar con su oferta «a raíz de los cambios en el escenario económico de la Argentina».
Ahora se analizará la propuesta económica de Metrovías para decidir si satisface los requerimientos de la Comisión Evaluadora integrada por representantes del gobierno porteño, del Ministerio de Economía y Finanzas y Sbase, con el asesoramiento del Metro de Barcelona y de la cátedra de Transporte de la Universidad Nacional de San Martín.
Si esto ocurre, entonces Metrovías, que depende del Grupo Roggio, prolongará el manejo del subte por doce años más, con opción a tres más de prórroga. Pero en caso contrario, el gobierno podría dar de baja el proceso de licitación y hacer un nuevo llamado. Es decir, volvería todo a foja cero.
En 2013 el subte pasó a ser controlado por la administración local y en ese momento se declaró la emergencia en el servicio para toda la red mediante la aprobación de una ley.
Esa norma marcó como fecha límite para el fin del contrato con Metrovías el 31 de diciembre de 2016, pero luego en la Legislatura se aprobó una prórroga hasta fin de 2017 y, un año después, a diciembre de 2018 y una extensión de un año más hasta el 31 de diciembre de 2019 cuando resolvieron desde el Ejecutivo continuar la prestación de Metrovías sin pasar por la Legislatura.
En el Gobierno porteño advierten que si la oferta económica no es convincente, podrían dejar desierta la licitación. Esto implicaría una nueva prórroga de la concesión para Metrovías mientras se organiza una nueva licitación (para tener una idea, la actual licitación arrancó a comienzos de 2018).
La estatización que se está pidiendo desde muchos sectores de la oposición y desde el gremio de los «metrodelegados» parece estar muy lejos de los deseos del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta.