Daniel «Chivo» Portas en Comunas un Desafío.

Publicado: 20 sep 2021
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Tuvimos el agrado y el honor de entrevistar este sábado a un «amigo de la casa» Daniel «el Chivo» Portas un gran militante político, ex delegado comunal de la Comuna 4 y ex director del INAP (Instituto Nacional de la Administración Pública).
Lo convocamos para analizar los resultados electorales de las PASO del domingo 12 y algunos aspectos generales de la política nacional y como veníamos hablando en el programa de las castas y las burocracias en los lugares que designan candidaturas se acopló y nos dijo:
«El término de <casta> no está mal usado porque finamente digamos <la burocracia> es una cosa diferente a las castas y lo que pasa por lo menos en la Ciudad de Buenos Aires se parece más a las castas porque se ve que se repiten los mismos candidatos en todas las elecciones cambiando las posiciones y en la provincia de Buenos Aires se podría decir que existe como una especie de burocracia donde es un grupo el que domina el reparto de cargos, pero nunca se repite el candidato a diputado es decir por ejemplo Fernanda Vallejos no renueva su mandato a diputada, entonces en algún lugar podemos decir que hay una< burocracia política> en el otro además de una burocracia hay <castas>, donde entra determinadamente un grupo, pero yo creo que eso es menor y no nos interesa.«
Y siguió, «menor en el sentido que son ellos que terminan perjudicando a la política en su desarrollo, que no lo resolves inmediatamente y no necesariamente son las que originan el resultado electoral, son prácticas que nosotros como militantes tenemos la necesidad de responder porque eso es lo que produce <el efecto Milei>, es decir donde el voto se va a un lugar de la anti política, porque la política es un sistema de privilegios, que no resuelve, que las cosas vuelven a ocurrir, que tenés inflación con este, con fulano y con mengano, que los cambios no les resultan sustanciales entonces de pronto empiezan a hacer la anti política, muchos de los fenómenos fascistas salieron de situaciones donde la política clásica no daba soluciones.»
Del resultado electoral del domingo expresa, «del tema de las elecciones, yo acuño hace un tiempo la idea que se hace un balance de que la elección se pierde por cuestiones únicamente económicas y yo creo que se pierde un voto por las cuestiones económicas, pero también me parece que hay algo más profundo que el peronismo no puede resolver, y diría yo en este sentido el kirchnerismo, siendo el sector del peronismo que más cercano yo siento, para que se entienda, que no estoy criticando desde la vereda de enfrente sino que estoy criticando casi en las orillas cercanas del kirchnerismo; al peronismo le cuesta retener cierto voto de la clase media porque culturalmente no la logra interpretar, es decir nosotros le estamos vendiendo un modelo de país que es noble, que es justo, pero que desatiende un montón de necesidades, de sueños, de expectativas de la clase media que esta únicamente vinculado o tiene un único discurso a los sectores populares, a los sectores más populares en el sentido más pobres, más que populares, porque la clase media también es popular y entonces se produce este vaivén donde los que sienten que le dicen algunas cosas que quieren escuchar por ejemplo a las libertades individuales, a la posibilidad de consumo de algunas cosas, lo vota,  después <estos los cagan económicamente> y vuelven otra vez hacia nosotros pero cuando vuelven hacia nosotros sienten ciertas seguridades pero sienten ciertos encorsetamientos para esas expectativas que tienen y vuelven al otro lado; si eso es así tampoco tenemos un discurso como para explicarle nuestra política, si tienen que postergar ciertas cuestiones de sus expectativas o sus expectativas están por fuera de las necesidades del país, no lo podemos reencausar porque no lo tenemos en el discurso, en ese sentido el peronismo es bruto, es torpe, es como que te quiere llevar de los pelos y eso funcionó durante muchos años en el peronismo pero cada vez funciona menos en la sociedades desarrolladas, te podrá funcionar en Afganistán, te podrá funcionar en Libia, te podrá funcionar en algunas culturas que vienen con otros bagajes pero ya en estas ciudades occidentales tan desarrolladas como las de Argentina, donde más de la mitad de la población vive en el AMBA, eso es muy difícil y entonces eso hace que oscila, te viene un día para nuestro lado porque el otro lado los castigó y en algún momento sienten que son castigados de alguna manera por nosotros, entonces parece el hijo separado que cuando se pelea con el padre va a ir a vivir con la madre y cuando se pelea con la madre va a ir a vivir con el padre.»
«Eso yo creo que no lo advierte nadie en términos generales y creo que para mí es la pérdida de parte del voto que oscila entre uno y otro y que son varios factores, todo lo que está ocurriendo en estos días.
La lectura de que, si son positivas o no (las correcciones politicas) la tendremos en el mes de noviembre, a mí me cuesta creer que esto sea una cuestión únicamente de cambio de gabinete, porque yo digo si tu balance, más allá de lo que yo opino que hay un voto que se pierde en términos culturales, si el balance es que el problema es únicamente económico quizás las únicos cambios que necesitabas dar, (porque los resultados de acá a 45 días no lo vas a tener por más que repartas poque el sistema que vos repartís tarda en llegar al final de la cadena), es hacer un cambio en las estructuras de la economía es decir en Kulfas, en Guzmán y no es que yo quiera que Guzmán se vaya, lo digo desde el punto de vista de propaganda o de marketing o el nombre que le quieran llevar hacia afuera, si el balance es que votaron porque la economía no funciona el ministro de Relaciones Exteriores que vos lo cambies la verdad… yo no hago una lectura directa de eso soy un ciudadano por fuera de la política.», señaló.
 
 
 
 
Luego del intervalo musical recordamos el aniversario de <La Noche de los Lápices> (16 de septiembre de 1976) y nos rememoró, «la verdad, creo que le pasó a Gregorio (uno de los interlocutores) si nosotros hubiéramos tenido un par de años más quizás hubiéramos estado en problemas; cuando empezó toda la movida política yo ni siquiera era un joven, era un púber y si bien se ve en la lista algunos chicos jóvenes estos tenían como dos, tres o cuatro años más.
Yo tengo un recuerdo más de toda la época de la dictadura que ahora la vivo como algo de <color> en el sentido de que digo <guauuu> que experiencia que vivimos, me acuerdo de no pronunciar algunas palabras porque denotaban de que signo político era tu casa, entonces borrabas de tus la palabra <compañero>, la palabra <pueblo>, porque te identificaban rápido, una cantidad de cosas que van más allá de lo político (muchas generaciones jóvenes eso no lo experimentaron), el hecho de bajarse de un colectivo y enfrentar un piquete militar y que te tuvieran una hora contra la pared para revisarte y preguntarte cosas para ver si alguna vez pisabas el palito; cuestiones que cuando salís vivo decís <guauuu> yo viví esa época que ahora parece de Netflix y no la verdad que nosotros la vimos en vivo y en directo.
Y agrega, «los cambios que se dieron en el colegio, (el golpe justo se da cuando yo estoy entrando a tercer año) me acuerdo que salí en diciembre del 75 en remerita y entré en marzo del 76 con saco, corbata y el pelo cortado arriba del cuello de la camisa, un cambio rotundo así, un zapatazo en tres meses y bueno son experiencias que yo creo que ojalá ningún argentino tenga que volver a vivir y eso que te estoy contando cuestiones culturales, no estamos hablando de los que sufrieron torturas, persecuciones y hasta la muerte.»
Y para ir cerrando la charla sobre cambiar el destino electoral añade«la verdad que ser optimista o no optimista, la verdad no tengo herramientas, es poco tiempo y el sentido común te dice que no, pero a veces es como en el fútbol, perdiste 3 a 0 estas desesperanzado, pero nadie te cierra la puerta que lo des vuelta, la verdad no tengo la meta, con la militancia podemos llegar a un sector importante pero bueno son muchos los que votan y posiblemente haya algunas herramientas de propaganda que tenían que ver con el cambio de gabinete, digo señales de que cambio querías hacer vos y en eso coincido más que a mí personalmente que este cambio de gabinete me represente específicamente, debiera haber un cambio en la tendencia de las políticas del gobierno, a mí no me parece tan claro en todos los casos, lo veo en el ministro de Educación, lo veo en el caso de la ministra de Seguridad porque fueron dos temas que sí estuvieron candentes pero en lo que respeta a la política económica y a la política sanitaria que son los cuatro ejes que se movieron mucho en la pandemia, los principales que son la economía y la salud, (no es que estoy diciendo que en salud estuvo mal) pero quiero decir los cambios de gabinete no los veo directamente para que el ciudadano de afuera lo vea como que hay un cambio en la política que por ahí lo que si puede percibir, y que los medios ayudan, es que esto fue una lucha de poder interna por los cargos.
El único gesto contundente era y no digo que tenga que ser así, era el cambio de la matriz económica que eran Guzmán y Kulfas, ese es un mensaje directo, lo otro no sé cómo lo van a tomar, no sé si se interpreta directamente como un cambio de políticas, la verdad que no lo sé; como yo no lo veo así puedo pensar que los otros no piensan igual que yo.»
Y se despide, dejando algunas explicaciones por su menor participación desde la discusión política, «en un momento no quise opinar mucho porque estaba muy crítico, no tenía capacidad para modificar la realidad y para hacer cuestiones testimoniales, la política argentina se ha hecho muy cruel porque te maltratan de manera visceral, no podía modificar la realidad y era testimonial, te masacraban así que lo mejor era esperar que surjan los resultados lamentablemente y después sacar un poco la cabeza y coincido (en lo expresado en el programa) le tengo más miedo a Rodríguez Larreta que al propio Mauricio Macri porque es la misma política pero con un tipo con mucho más manejo que el que tenía el bruto de Macri.»